Mazatlán, Sin.– Las últimas 24 horas de Jairo, de solo un año y cinco meses de edad, asesinado presuntamente por su padrastro el pasado 7 de diciembre, fue de mucho dolor. Recibió golpes muy fuertes, lo que finalmente le ocasionó la muerte.
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De acuerdo a la relatoría de los hechos que dieron los agentes del Ministerio Público (MP), la víctima es un niño que fue torturado en el poco tiempo que tuvo de convivencia con su padrastro de nombre José Alberto “P”. Y es que los golpes que recibió durante apenas un mes que estuvo con él, fueron verdaderamente de terror y de no creerse, e incluso, se refiere que lo hizo que probara cocaína.
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Al mediodía de este lunes, se llevó a cabo la audiencia inicial ante la jueza de Control y Enjuiciamiento de la causa penal 748/2023 en contra de José Alberto “P”, por el presunto homicidio doloso del menor.
Durante la audiencia, los agentes del MP asignados por la Fiscalía General del Estado expusieron la carpeta de investigación donde detallaron las últimas horas del niño en la ciudad de Mazatlán y los antecedentes que ya se tenían de violencia familiar.
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La Fiscalía detalló que fue la mañana del día 4 de diciembre cuando José Alberto agredió tanto a la madre, de nombre Jenifer Daniel, como al niño, en la ciudad de Los Mochis, para luego pedirle perdón y llevarlos a Mazatlán para que nadie se enterara de los golpes que le dio al menor.
Fue el día 5 de diciembre cuando se registraron en un hotel ubicado en la avenida Rafael Buelna y la mañana del día 6, se expuso en la audiencia, el niño estaba llorando, por lo que la madre se levantó para asearlo porque se había hecho del baño.
Esto no le gustó a José Alberto, y en represalia lo golpeó severamente en todo el cuerpo, a pesar de que la madre trataba de impedírselo.
Jenifer se dio cuenta de que su pequeño emitía saliva con sangre y que no se movía, por lo que le pidió que fueran a un hospital a llevarlo. Él la amenazó con una plancha para que se callara y finalmente, accedió a ir a una farmacia Similares para comprarle medicinas al menor, pero con la amenaza de que no dijera nada.
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Personal de aseo del hotel entró a limpiar la habitación y se dio cuenta que había sangre. Al regresar de la farmacia, la pareja con el niño decidió cambiarse a otro hotel ubicado por la avenida Rafael Buelna.
Fue a las 07:30 de la mañana del día 7 de diciembre cuando al ver que el niño salivaba sangre y que no se movía, que accedió a llevarlo al hospital de la Cruz Roja para que lo atendieran, con la amenaza a la mujer de que no dijera nada de los golpes y le exigió que dijera que el niño se había caído de la terraza.
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Al entrar a la atención médica, los doctores y pasantes se dieron cuenta de que el pequeño de 1 año ya no contaba con signos vitales, por lo que le pidieron a la madre que dijera la verdad y fue cuando les confesó que su pareja lo había golpeado hasta quitarle la vida, que este se encontraba afuera y la mantenía amenazada.
Al llamar al número de emergencias, acudieron elementos preventivos motorizados y al ver que entraba un agente a la recepción, José Alberto “P” aprovechó para escapar y, a pesar de la búsqueda por los alrededores, no fue localizado.
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Durante la lectura de la carpeta de investigación, se dio a conocer que esta persona tenía cuatro carpetas de investigación por violencia familiar y amenazas contra exparejas. A una de ellas la amenazó de muerte con un arma punzocortante y le hizo llegar fotografías de personas asesinadas con la advertencia de que eso le podría pasar a ella.
Además, se dio a conocer que buscó en Facebook la cuenta de Jenifer Daniel y le envió mensajes de que le perdonara lo que había hecho, que volvieran a estar juntos, y si no era así, la iba a buscar hasta encontrarla para quitarles la vida a ella y su familia.
Finalmente, el domingo 11 de febrero fue localizado y detenido en la colonia Romanillo, en la ciudad de Los Mochis.
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Luego de la exposición de motivos, la juez de Control autorizó la duplicidad del término para la continuación de la audiencia inicial para el viernes 16 de febrero, cuando se definirá si es vinculado a proceso. En tanto, le dictó la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa.