París. – El momento por el que trabajó desde hace 10 años, al fin llegó. El sueño de un niño de 12 años que empezó cuando dio sus primeros pasos en el boxeo se cumplió este viernes en París, hoy Marco Alonso Verde Álvarez es medallista olímpico.
Después de perder por decisión unánime, ante el atleta de Uzbekistán, Asadkhuja Muydinkhujaev, Marco Verde se colgó la medalla de plata y subió al podio donde vio la bandera de México ondear desde lo alto.
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Como parte del protocolo, Marco Verde recibió la medalla después de los atletas de Estados Unidos y China quienes cayeron en semifinales y se quedaron con el bronce olímpico.
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Después de escuchar el himno de Uzbekistán, los atletas se tomaron la ya tradicional “selfie”, en la que posaron los cuatro medallistas y al finalizar, el joven de Mazatlán abrazó a quien minutos antes fue rival en el ring para felicitarlo por su triunfo.
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Marco Verde estuvo sonriendo en todo momento desde que subió al ring para recibir su medalla y aplaudió de forma efusiva a los otros medallistas.
Esta medalla significa la culminación de un sueño que inició este ciclo olímpico para el sinaloense, el cual nació hace 10 años y fue inspirado por su padre, Manuel “Sammy” Verde que también fue boxeador olímpico en Barcelona 92.