Culiacán, Sin.– El fentanilo es una sustancia narcótica que puede desdibujar las líneas entre la realidad y la fantasía. Su potencia y peligrosidad son tales que pueden llevar a los jóvenes a experimentar aislamiento y problemas mentales.
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Luis Ramos, director de Centros de Rehabilitación, describe el consumo de fentanilo como un oscuro viaje que altera la percepción de la vida y plantea una amenaza seria de muerte.
En una entrevista con Línea Directa, Ramos advierte sobre la creciente práctica de combinar fentanilo con sustancias como el cristal, con el objetivo de aumentar la adicción y “enganchar” a los usuarios de manera más intensa.
“Un adicto con tal de consumir no sabe lo que se está introduciendo en el cuerpo. Se consume en pipas, en foco, en gotero. Hay personas que han llegado temblando, hablando solos. Queriendo arrancarse la piel al sentir que algo se les mueve debajo de esta. Han llegado a tal grado que no hay control. Se está mezclando fentanilo y cristal al mismo tiempo. Vulgarmente, la gente no sabe lo que se está introduciendo en este momento”, comentó.
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De acuerdo con información de la Secretaría de Salud de Sinaloa, cuatro personas han perdido la vida por intoxicación por sobredosis de fentanilo, incluyendo un bebé, lo que va de este año en hospitales. El secretario de Salud del Gobierno del Estado, Cuitláhuac González Galindo, detalló que han atendido un total de 98 casos de urgencia, donde los pacientes llegaron en estado crítico bajo los efectos del fentanilo. De estos, 94 son adultos, con tres fallecimientos, y cuatro son niños, entre ellos un bebé de un año que perdió la vida el pasado fin de semana en Culiacán.