Culiacán, Sinaloa. El gobernador Rubén Rocha Moya lamentó el asesinato del comandante de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Culiacán, Juan Carlos “N”, ocurrido la mañana de este martes cuando se trasladaba en un automóvil por una de las calles del fraccionamiento Nakayama en el sector de Barrancos, al surponiente de la ciudad.
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El mandatario estatal comentó que fue en la Mesa de Seguridad donde informaron sobre el homicidio, sin embargo, dijo que no cuenta con más detalles, solo que era un elemento municipal que tenía 25 años de antigüedad.
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Señaló que los policías son conscientes de su labor, saben cuidarse y conocen también el riesgo al que se exponen por proteger a la ciudadanía.
“Lamentablemente hay policías y hay ciudadanos y este es un problema que tiene que ver con homicidios dolosos y que se está reportando ¿y qué hacer?, lo que estamos haciendo, seguramente si no estuviéramos haciendo eso, hubiera muchos más. Entonces tenemos un operativo desplegado”, declaró.
El gobernador de Sinaloa destacó el reciente arribo de elementos de las fuerzas federales que acuden para reforzar el operativo de seguridad en la entidad, el cual se va a mantener en el combate a la inseguridad.
EL HECHO
Un comandante de la policía municipal de Culiacán y supervisor operativo de la corporación fue asesinado a balazos por gatilleros al momento en que viajaba en un automóvil en una de las calles del fraccionamiento Nakayama en el sector de Barrancos, al surponiente de Culiacán.
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El mando policiaco se llamaba Juan Carlos y se trasladaba en un automóvil Volkswagen Jetta, de color gris, con placas de Sinaloa y se dirigía de poniente a oriente por el bulevar Las Torres, entre las avenidas Antonio Nakayama y Francisco R. Serrano.
Ahí fue interceptado por gatilleros que le dispararon en repetidas ocasiones, lo que lo hizo perder el control del volante frente a una plaza y el auto chocó directo contra un poste de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
