Culiacán, Sin. – Este viernes concluyó el primer congreso de Investigadoras Sinaloenses, evento organizado por la Coordinación General para el Fomento a la Investigación Científica e Innovación (Confíe), en las instalaciones del parque temático.
Para el cierre de actividades se contó con seis mesas de trabajo, donde fueron expuestas y discutidas 141 ponencias de 183 investigadoras sinaloenses participantes, así como un recorrido por la galería donde se expusieron 119 carteles.
El evento, de acuerdo con los organizadores, tiene como finalidad “construir un futuro donde el género no sea barrera para la excelencia científica”. El punto de partida es básico. En México, las mujeres dedican el 63 por ciento de su tiempo total de trabajo a labores no remuneradas o a cosas del hogar.
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Tomadas estas cifras como punto de partida, desde el Confíe, a través de la Dirección de Mujeres en la Ciencia a cargo de Itzé Coronel Salomón, realizaron el evento en coordinación con el Centro de Políticas de Género para la Igualdad entre Mujeres y Hombres de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) en el Centro de Aprendizaje Vivencial de la Ciencia y la Tecnología, en el antiguo parque temático.
El ejemplo lo ilustran los datos. En el censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) de 2002, de los mil 371 millones de horas a la semana que la población en todo el país dedica a los quehaceres domésticos y al cuidado de los niños, el 88 por ciento corresponde a las mujeres.
En 2023 la cifra es del 63 por ciento. Si bien el avance puede parecer mínimo, la brecha en poco más de 20 años comenzó a caer. Por eso la relevancia de estos eventos.
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Y la relevancia es tal que el acto de clausura fue la conferencia magistral “Proyectos de investigación con enfoque de sostenibilidad en especial cuidado del agua”, impartida por María Aurora Armienta Hernández, investigadora emérita del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y quien desde el 2009 forma parte de un equipo de científicos y científicas que estudian el fenómeno del estrés hídrico.
Y en Sinaloa ese es un problema ya. La actual sequía golpea ya de forma extrema a todo el estado. La ciencia debe ser un vehículo para encontrar soluciones, y por eso, la participación de la mujer en la ciencia es tanto justa como necesaria: hace falta más gente de ciencia.