Culiacán, Sinaloa.- Es muy lamentable el fallecimiento de Jared Guadalupe por una bala perdida, una víctima de apenas cinco años que estaba haciendo lo que tiene que hacer un niño en las fiestas de Año Nuevo, expresó el director de Construyendo Espacios para la Paz, Javier Llausás Magaña.
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La noticia que ha consternado a los culiacanenses en el inicio del 2023, dijo, es un momento que debe ser tomado con mucha reflexión por la sociedad, y cuestionarse el nivel de ciudad que se está construyendo, en donde una persona cobarde, bajo el anonimato y sin consciencia de sus acciones, acaba con la vida de un niño inocente.
Pero, también, mencionó que los ciudadanos deben pensar los motivos por los que, si son testigos de que una persona está disparando al aire, ya sea conocido o extraño, no hace la denuncia pertinente o no detienen al involucrado.
“Yo creo que aquí, como sociedad, tenemos que reflexionar y dedicar a este pequeño, a Jared, a este niño que debería estar con nosotros, dedicar un esfuerzo sin precedentes para erradicar esta cultura”, declaró.
Alan regresa a casa con la bala en su cuerpo; es el niño que recibió un impacto en Año Nuevo en Culiacán
Es un trabajo que se tiene que avanzar entre sociedad y gobierno, que, en este caso, indicó, fueron testigos de cómo se desplegó un operativo especial para disminuir los disparos al aire.
Llausás Magaña, condenó que en Sinaloa se continúe con la mala cultura de “festejar” el Año Nuevo tirando balas al aire, sin saber qué dirección va a tomar, ni cómo y a quién pudiera afectar en su descenso.
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Jared Guadalupe, de cinco años, celebraba con su familia en la colonia Las Coloradas, cuando de pronto fue herido por una bala perdida. Fue trasladado al Hospital Pediátrico de Sinaloa, en donde fue atendido durante la madrugada del primero de enero, sin embargo, perdió la vida.