Guasave, Sin. – Sobre una de las paredes de la casa ubicada por la calle Gabriel Leyva Vázquez ya se había colocado una lona con el nombre del pequeño Alán adornada con unos tractores ya que este jueves su familia le festejaría su cumpleaños número 2.
El niño y sus padres se vinieron desde el ejido Vicente Guerrero para que él disfrutara de su apenas segundo año de vida en la casa de sus abuelos y ya todo estaba prácticamente listo para la fiesta en honor al más pequeño de la casa.
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Nadie se imaginó que a la hora que se suponía la piñata de Alán estaría en todo su esplendor lo que trágicamente iban a terminar preparando era su velorio.
Cuando se encontraban en los preparativos para la fiesta de Alán, su madre cruzó de la casa de sus padres a la calle de enfrente para recoger unas papitas sin darse cuenta que por instinto natural el niño se fue detrás de ella y justo en ese pequeño momento fue arrollado por el conductor de una Dodge Durango.
Para cuando la señora Adali volteó ya vio a su hijo gravemente herido sobre la calle mientras el chofer de la unidad se retiraba con rumbo desconocido.
Después los minutos fueron un letargo de sufrimiento para la joven mujer, de pedir auxilio y ayuda para Alán que ya no volvió a responder, su inocente voz se apagó el día que más debió haber gritado de alegría.
Cuando llegaron paramédicos de Cruz Roja solo fue para confirmarle a la familia que el pequeño había perdido la vida el mismo día que le fue concebida.
El pequeño Alán no alcanzó a disfrutar su fiesta de cumpleaños; ahora alistan su despedida terrenal/Ararak Salomón
Según versiones de algunos vecinos el conductor de la Durango había ido a dejar a su casa al abuelo de Alán para que comiera, aunque policías dijeron no tener confirmación de esa situación.
Ahí se quedaron los dulces, el pastel y la piñata que estaban destinados para que el pequeño Alán pasara una fiesta inolvidable.
