Culiacán, Sinaloa.- La destrucción a balazos de alrededor de 80 cámaras de videovigilancia que se dio la noche del lunes y madrugada de este martes por grupos armados en varios puntos de la ciudad, pero en particular en la zona Centro, provocó terror entre los empleados del comercio, que no llegaron a abrir sus locales, reveló Óscar Sánchez Beltrán, presidente de la Unión de Locatarios del Centro de Culiacán.
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El líder de los comerciantes, calificó como un acto de terrorismo, al grado que los trabajadores no llegaron, principalmente en el mercado Gustavo Garmendia, los negocios que preparan alimentos y de oficina, que hacen la limpieza muy de mañana.
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Sánchez Beltrán reprochó al gobierno que no se puede vivir así en Culiacán, porque lo ocurrido es muy grave, porque duraron mucho las balaceras en gran parte de la capital y no hubo una atención oportuna de las distintas corporaciones policiacas.
“El terrorismo que se generó el día de hoy por la mañana afecto las actividades comerciales, bastante personal que acude el al centro comercial a iniciar las operaciones de los comercios pues no llegaron”, se quejó.
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Finalmente, externó que ante estas circunstancias, la Unión de Locatarios del Centro de la Culiacán se retira del programa de interconexión porque no hay condiciones para que participen los agremiados con las autoridades en un proyecto con sus cámaras, ya que es evidente que el crimen organizado se ha impuesto en Sinaloa.
