Con la llamada Cuarta Transformación, se promulgó la Ley General en materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, y el Plan de reestructuración estratégica del Conacyt, documentos que direccionan las estrategias del nuevo gobierno en materia educativa y científica.
El Programa Especial de Ciencia, Tecnología e Innovación (Peciti) establece las bases estratégicas de una política de humanidades, ciencias, tecnologías e innovación (HCTI), el cuidado ambiental y la protección de la riqueza biocultural de México.
Sigue las columnas de Jorge Guillermo Cano en la sección especial de Línea Directa
Ello, según se declara, “a partir de los principios del humanismo, la equidad y la no discriminación”, de manera que “se garantice para las y los mexicanos el derecho humano a la ciencia y el acceso universal al conocimiento”.
El Peciti está pensado con base en los “principios de interés nacional y justicia social”, a la austeridad republicana y en el combate a la corrupción que es bandera de la Cuarta Transformación.
UN CAMBIO DE PARADIGMA
Se pretende “un cambio de paradigma en la política de HCTI sobre la base de la articulación virtuosa entre el sector público, la academia y el sector productivo”.
El Peciti se estructura a partir de seis objetivos prioritarios que orientarían el quehacer científico, tecnológico y de innovación en México:
Objetivo prioritario 1: Fortalecer a las comunidades de CTI y de otros conocimientos, a través de su formación, consolidación y vinculación con diferentes sectores de la sociedad, con el fin de enfrentar los problemas prioritarios nacionales y contribuir al bienestar general de la población.
Objetivo prioritario 2: Alcanzar una mayor independencia científica y tecnológica y posiciones de liderazgo mundial, a través del fortalecimiento y la consolidación tanto de las capacidades para generar conocimientos científicos de frontera, como de la infraestructura científica y tecnológica, en beneficio de la población.
Objetivo prioritario 3: Articular a los sectores científico, público, privado y social en la producción de conocimiento humanístico, científico y tecnológico, para solucionar problemas prioritarios del país con una visión multidisciplinaria, multisectorial, de sistemas complejos y de bioseguridad integral.
SOLUCIONES SUSTENTABLES
Objetivo prioritario 4: Articular las capacidades de CTI asegurando que el conocimiento científico se traduzca en soluciones sustentables a través del desarrollo tecnológico e innovación fomentando la independencia tecnológica en favor del beneficio social, el cuidado ambiental, la riqueza biocultural y los bienes comunes.
Objetivo prioritario 5: Garantizar los mecanismos de acceso universal al conocimiento científico, tecnológico y humanístico y sus beneficios, a todos los sectores de la población, particularmente a los grupos subrepresentados como base del bienestar social.
Objetivo prioritario 6: Articular la colaboración entre los diferentes niveles de gobierno, IES y centros de investigación, para optimizar y potenciar el aprovechamiento y reutilización de datos e información sustantiva y garantizar la implementación de políticas públicas con base científica en beneficio de la población.
Importante tener en cuenta todo lo anterior, a fin de poder evaluar en el mediano y largo plazo.
ES CONTRA MORENA Y CONTRA CLAUDIA
La infame campaña “periodística” contra el gobernador Rocha Moya, contra Sinaloa y particularmente contra Culiacán, en realidad es una campaña contra Claudia Sheinbaum y el movimiento de Morena, aunque algunos pretendan no entenderlo.
Sin prueba alguna, con el más crudo estilo del periodismo mercenario, la locutora Uresti, la revista Proceso y un “freelance” (eso dice) de apellido Chaparro, propalan consignas, siembran rumores, dan carta libre a calumnias y hacen gala de un libertinaje sin freno. Nada prueban, salvo que no tienen pruebas.
En la tandariola, la “tortuguertz”, la FGR, que no se atreve a enfrentar la desinformación a sabiendas de los Estados Unidos y algunos arribistas de la cuarta, a la espera de “señales” para brincar.
Y en los tiempos de la post verdad no falta quien se cuelgue del sinsentido.
EN EL TINTERO
-Es justo el reclamo del gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya: “Azucena Uresti y Luis Chaparrro (hay varios más) deben revisar sus fuentes y hacer un periodismo más responsable y objetivo pues con sus mentiras están contribuyendo a ver si se atenta contra mí”. Así es, en efecto. ¿Peras al olmo?
-Lenta en demasía, la Sedena, en su revisión de armas que tiene a Culiacán sin policía ni agentes de tránsito. Demasiado tardada, mientras al alcalde se le olvida la autonomía municipal.
-Parece que se trata de que Culiacán siga en el caos para culpar al gobierno estatal.