Estados Unidos. El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha propuesto una nueva medida que involucra la venta o alquiler de más de 160 kilómetros de terreno en la frontera con México para fortalecer la seguridad y frenar la migración ilegal.
Esta oferta al Gobierno federal incluye la transferencia de un tramo de muro fronterizo ya construido, además de infraestructura que albergaría a miles de miembros de la Guardia Nacional y miles de celdas para detener a migrantes.
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Abbott, reconocido por sus políticas antimigrantes y alineado con las de Donald Trump, ha destinado más de 11 mil millones de dólares a la “Operación Estrella Solitaria”, una iniciativa de militarización de la frontera que ha enfrentado críticas y tensiones.
La operación incluye el despliegue de efectivos de la Guardia Nacional y la instalación de medidas como concertina y barreras flotantes en el río Grande.
Además de la controversia por el uso de la fuerza, las acciones de Abbott han sido condenadas por organizaciones de derechos humanos, que han documentado el uso de tácticas agresivas por parte de las autoridades fronterizas, como el empleo de gas lacrimógeno y bolas de goma para repeler a los migrantes.
