Rusia.- La masacre ocurrida la semana pasada en la sala de conciertos del Crocus Music Hall sigue atrayendo la atención en todo el mundo, pues este miércoles 27 de marzo se han revelado detalles sobre la huida de los terroristas, quienes permanecieron prófugos por varias horas antes de lograr ser detenidos.
De acuerdo con la información compartida por el diario italiano Corriere della Sera, los presuntos responsables del tiroteo viajaron cientos de kilómetros a bordo de un auto destartalado tipo Renault, logrando dejar atrás a policías, tropas especiales, cámaras y satélites.
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Registros oficiales señalan que los atacantes llegaron a Krasnogorsk, el lugar del ataque, a bordo de un Renault Symbol blanco. Entraron a la sala de conciertos a las 19:58 locales, dispararon en contra de cientos de personas y luego prendieron fuego al recinto, abandonando el lugar a las 20:11 horas.
Los sujetos tomaron la circunvalación de Moscú – la Mkad, habitualmente semiparalizada a esa hora – y luego la autopista M3 que lleva a las fronteras con Bielorrusia y Ucrania. Condujeron casi 400 kilómetros sin ser detenidos, burlando la llamada Pautina, el sistema de vigilancia que cubre toda la red de autopistas rusas y —según las autoridades— permite analizar las imágenes al instante.
Aunque el Renault ya había sido filmado por las cámaras de seguridad del Crocus Music Hall y en la autopista había poco tráfico a la noche, los hombres lograron conducir durante varias horas, hasta que finalmente el vehículo fue interceptado en el pueblo de Khatsun, en la región de Briansk, cuando los terroristas ya estaban a 378 km de la capital.
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En Briansk, fronteriza con Ucrania, habían sido alertados el Grupo de Cobertura de Fronteras, formado por hombres de la Guardia Nacional de Rusia, el FSB, la policía y la milicia chechena. Los agentes dispararon contra el coche, que no se detuvo, y pincharon al menos una rueda, pero los terroristas continuaron su fuga.
Los sospechosos abandonaron el vehículo y se refugiaron en el bosque, pero fueron sorprendidos uno a uno por los soldados y combos caninos que se desplazaron por todo el lugar.