EU.- En Carolina del Norte, Estados Unidos, una joven de tan solo 22 años sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en su cuerpo, luego de que intentara apagar un incendio que comenzó al dejar un sartén con aceite en la estufa.
La joven afirma que había cocinado papas fritas y que luego se fue a ver la televisión con su prometido, pero que después de una hora empezó a oler raro por lo que fueron a la cocina y poco después descubrieron que el sartén con aceite ya se estaba incendiando.
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La pareja intentó apagarlo abriendo las ventanas pero no pudieron, llamaron a los bomberos pero en lo que llegaban la joven sacó la sartén de la casa recibiendo fuertes quemaduras en sus piernas, brazos, pecho y también en su cara.
Los bomberos y una ambulancia llegaron, llevaron a la joven al hospital y allí le dijeron que tenía quemaduras de segundo y tercer grado. La mujer afectada y su novio, se iban a casar en seis días, pero debido a la situación, tuvieron que cancelar la boda.
La joven recibió un trasplante de piel y su novio la cuidó en todo momento hasta que perdió las ampollas y su piel se recuperó por completo. La pareja se casó tres meses después de que pasó este incidente.