Reino Unido.- La muerte de Kaylea Louise Titford, de 16 años de edad, está generando un amplio debate en redes, pues aunque se determinó que la joven falleció por “inflamación e infección en extensas áreas de ulceración derivadas de la obesidad”, el Tribunal de Magistrados de Welshpool acusa a sus padres como presuntos responsables de asesinato.
Kaylea fue hallada sin vida el pasado 10 de octubre en su casa de Newtown, Powys, en el Reino Unido. Si bien la adolescente fue sometida a una serie de exámenes que relacionaron su deceso con la obesidad que padecía, las autoridades acusan que sus padres, Alun Titford, de 44 años, y Sarah Jane Lloyd-Jones, de 39 años, son responsables de “homicidio por negligencia”.
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Todo indica que los padres de la menor habrían permitido que su salud se agravara al pasar por alto su obesidad mórbida, pues a durante más de un año no se aseguraron de satisfacer las necesidades dietéticas de la joven, dando oportunidad de que su condición de salud emporara hasta acabar con su vida.
Adicional a esto, los padres también enfrentan cargos por no asegurarse de que Kaylea hiciera suficiente ejercicio, estuviera en condiciones higiénicas, tuviera un entorno seguro e higiénico, mantuviera su salud física o se buscara una ayuda médica razonable. El juez de instrucción, Graeme Hughes, explicó sobre este caso:
Aunque la causa médica de la muerte puede ser natural,las circunstancias que precipitaron la muerte de Kaleigh están siendo investigadas por la policía de Dyfed-Powys
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(…) Como tal, esas investigaciones me dan razones para sospechar que la muerte de Kaleigh puede ser antinatural, en el sentido de que una causa natural de muerte puede considerarse antinatural cuando hay alguna participación o contribución humana culpable en esa muerte.
Aunque la pareja se declaró inocente ante el tribunal, este último determinó que permanecerían en libertad condicional hasta su juicio definitivo el próximo 14 de octubre.
