Bélgica. La muerte de un clérigo presuntamente involucrado en una fiesta sexual obligó este lunes a las autoridades de Bélgica a iniciar una investigación judicial. El fallecido, un cura británico, de 69 años de edad, perdió la vida de manera misteriosa en la ciudad de Heide cerca de Kalmthout, Bélgica.
Presuntamente el hoy occiso se encontraba de visita en la ciudad con motivo de la visita del papa Francisco al país. Además se confirmó que mantenía una amistad con el párroco local, quien fue detenido el fin de semana por traficar drogas.
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Trascendió que el viernes por la noche el cura de Heide dio aviso a los servicios de emergencia después de que su amigo se desmayó al encontrarse presuntamente intoxicado. Tras el aviso los cuerpos de emergencia intentaron reanimarlo sin resultados positivos.
El Servicio Médico Forense informó que los dos hombres habían consumido juntos éxtasis y popper mientras mantenían relaciones sexuales.
Por el momento las autoridades están a la espera del examen toxicológico del cuerpo que permitirá determinar si el sacerdote inglés falleció a causa de los efectos del consumo de drogas o por otro motivo.
Luego de la detención del sacerdote local, los vecinos se mostraron consternados, “por lo general, los sacerdotes se encierran en sí mismos y, por supuesto, también tienen necesidades. Es un desastre que retraten al párroco bajo una luz tan desfavorable”.
