Estados Unidos.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) y los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han advertido que el sarampión, pese a ser una enfermedad ya conocida, podría llegar a expandirse de manera preocupante, representando una amenaza inminente para el mundo.
A través de un comunicado conjunto, las entidades sanitaras señalaron que, en su afán por responder a la pandemia de COVID-19, quizás llegaron a descuidarse otros programas de salud, debilitando así la supervisión de enfermedades como el sarampión. Es por esto que ahora se realiza un llamado para atender inmediatamente las medidas de prevención con respecto a esta y otras enfermedades infecciosas.
Te puede interesar: Nueva subvariante del COVID-19 es originaria de Yucatán; se llama “inframundo maya”
En particular, cabe apuntar que el virus de sarampión tiene un alto grado de propagación, pues su transmisión entre las personas es muy elevada; no obstante, es posible prevenirlo con un esquema de vacunación, el cual debería inmunizar a por lo menos el 95 por ciento de la población para controlar los brotes. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS, señaló recientemente:
La paradoja de la pandemia es que, si bien las vacunas contra el COVID-19 se desarrollaron en un tiempo récord y se desplegaron en la campaña de vacunación más grande de la historia, los programas de inmunización de rutina se vieron gravemente interrumpidos y millones de niños se perdieron las vacunas contra enfermedades mortales que salvaron sus vidas. como el sarampión.
Sigue más noticias como esta en nuestra sección Internacional
En tanto, el responsable del sarampión en la OMS, Patrick O’Connor, señaló que, pese a que los casos aún no son tantos como en años anteriores, es el momento de actuar para evitar que su propagación alcance niveles catastróficos, pues detalló:
El número récord de niños con vacunas insuficientes y susceptibles al sarampión muestra el daño profundo que los sistemas de inmunización han sufrido durante la pandemia del COVID-19 (…) Estamos en una encrucijada (…) Serán 12 a 24 meses muy desafiantes tratando de mitigarlo.