México.– “Ayuda un poco, apagando un foco” nos dicen nuestros padres cuando ven que la casa parece “circo” con todas las luces encendidas, la mayoría de ellas sin necesidad. Igual pasa con los cargadores de celulares, lámparas conectadas, televisores en estado de reposo, microondas y eso sin contar los equipos que deben estar todo el tiempo conectados, como refrigerador y aires acondicionados en esta época.
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Pues bien, cuando el verano ante la CFE ya está corriendo, (recordemos que en el tarifario se activa en mayo) la tarifa DAC, la que marca el excedente y que tiene un cobro específico, también está activa y hace que el valor de la energía que consumes y que se marca en tu recibo, también engrose el pago final.
Por ejemplo, durante el actual mes de junio, los valores en el cobro de energía se dividen en cuatro dependiendo el tipo de consumo: Básico, intermedio bajo, consumo intermedio alto y el consumo excedente, el DAC.
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Por el consumo básico (tarifa 1F), durante este mes el costo por cada uno de los primeros 300 (trescientos kilowatts-hora) es de 0.722 pesos; para el intermedio bajo es de $0.904 por por cada uno de los siguientes 900 (novecientos) kilowatts-hora; para el intermedio alto de $2,198 para mil 300 kwh y en el excedente de 3.474 pesos por cada kilowatt-hora adicional a los anteriores, sí adicional a todos los demás.
“El verano es el periodo que comprende los seis meses consecutivos más cálidos del año, los cuales serán fijados por el suministrador, definido en la Ley de la Industria Eléctrica, de acuerdo con las citadas observaciones termométricas que expida la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales”.
Hablar de consumo excedente es tomar en cuenta que en una vivienda que tiene nivel intermedio bajo, se pueden tener entre tres aires acondicionados (o más) encendidos simultáneamente o simplemente uno pero constante todo el día; se suma un televisor conectado las 24 horas (aunque creas que está apagado, recuerda que si está conectado, está tomando energía), el refrigerador, la lavadora, abanico, celulares, computadora, lámparas, focos, más lo que se acumule.
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No hay bolsillo que soporte esa cantidad de energía al mismo tiempo, por ello, la importancia de medirle al uso de equipos, programar el encendido de los de refrigeración y soportar un poquito el calor, para tener un sueño reparador ahora sí, con el poder del fresco que te brindan los “aires o climas” como se les llama comunmente.
