Los Mochis, Sin. -La violencia en las escuelas no es cosa menor, sino que se trata de una emergencia nacional que debe ser atendida, porque la población estudiantil traslada los conflictos de casa a los planteles y se refleja en conductas agresivas o en un bloqueo, es decir se desconectan del mundo y tienen que llamar a emergencia, reveló Lilia Dolores Soler Valdez
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La subdirectora de la Secundaria Jaime Torres Bodet mencionó que cada vez son más frecuentes los hechos de violencia que protagonizan los alumnos, por ello tiene un proyecto holístico que llevó al Senado de la República, al ayuntamiento de Ahome y a la Secretaría de Educación Pública para que se destine dinero y acciones a contrarrestar esta situación.
“Lamentablemente hemos sido rebasados por el tejido social dañado en las familias y esa violencia de los hogares la están transpolando a los centros escolares y pues hemos visto lamentablemente pleitos y algunas agresiones, es educación básica para la vida y para la paz social, esta es una emergencia nacional”, precisó.
Detalló que su trabajo está enfocado a los valores, a la cultura de la legalidad, pero también a que los menores de edad reciban su desayuno en las escuelas, porque muchos de ellos quedaron huérfanos por la violencia o por el COVID-19.
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Propone que cada plantel cuente con atención psicológica y con paramédicos porque son frecuentes estas emergencias en las escuelas del nivel básico.
Mencionó que se necesita que la autoridad cuente con el padrón de la niñez que esta huérfana para que le garantice la educación, le dé seguimiento desde que ingrese al jardín de niños hasta la universidad.
