Guasave, Sin. – “Estuvo muy fuerte, era horrible ver como volaban muchos objetos y se impactaban las cosas en casas“, expresó María Laura todavía con el impacto de una de las peores catástrofes que ha vivido Estados Unidos por un fenómeno climático, el Huracán Ian, categoría 4.
En estos momentos, la guasavense, se encuentra de intercambio académico en la Universidad de Florida en los Estados Unidos, este es un convenio que tiene el CIIDIR Sinaloa con esta casa de estudios. La universidad tiene varios centros y el laboratorio en el que está llevando a cabo la investigación, es el llamado The Whitney Laboratory for Marine Bioscience, se encuentra en Marineland a una hora al norte de Orlando frente a la costa del Océano Atlántico.
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Narra que el laboratorio está frente al mar y tuvieron que evacuar ya que estábamos en una zona de mucho peligro. Se trasladaron al lado este a New Smyrna y no le tocó que “estuviera tan feo”, como en otros lugares completamente devastados, pero sí hubo demasiada lluvia y vientos muy fuertes que en algunos lugares levantó árboles y señalamientos. En la casa a la que se trasladaron se les metió el agua, pero no pasó de eso al final todos están bien.
“A mí me tocó los partes más fuertes por la noche y no pude dormir con el temor de que se fuera a romper algún cristal o se fuera impactar algo que estuviera volando en la casa donde estaba refugiada. Me tocó ver que había señalamientos y árboles que se arrancaban de la tierra. Aunque a mí ya no me toco estar en categoría 4 como fue cuando tocó tierra, aun así, el desastre que se generó fue muchísimo”, dijo.
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Al paso del “huracán Ian” consideró que a las zonas afectadas les va a costar muchísimo recuperarse de este desastre por lo que no sería mala idea apoyar a los grupos de voluntariado que están haciendo actividades de rescate, particularmente a ella, dijo, sólo le queda agradecer a la familia que la albergó y protegió durante este peligroso fenómeno.