Culiacán, Sin.- Este 21 de julio se cumplen dos años del asesinato de José Román Rubio López y el caso sigue sin resolverse, por lo que Óscar Loza Ochoa, activista por los derechos humanos, lamenta que la deuda con la sociedad siga.
En ese sentido, el integrante de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos de Sinaloa (CDDHS) ve como un mal mensaje por parte de las autoridades el que este caso no se haya resuelto, al tratarse de un activista y un defensor de los derechos indígenas, además de haber fundado y dirigido al Colectivo Tarahumara Sinaloense.
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“Es un mal mensaje porque lo que menos podemos pensar el resto de los ciudadanos, que si una persona como él, que no solamente era un activista destacado, era una persona que protegía a un grupo vulnerable como lo son los tarámaris, que son los tarahumaras que viven en el municipio de Sinaloa, y que haciendo esa labor altruista, ni siquiera se le responda con hacerle justicia a su caso”.
Román Rubio fue encontrado asesinado el 21 de julio de 2021 junto a Esteban López Beltrán. Trascendió que la noche anterior se reportó su desaparición y horas más tardes fueron hallados sin vida.
El caso causó tal relevancia que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) condenó el homicidio de Rubio López, exigiendo a la Fiscalía General del Estado de Sinaloa realizar una investigación eficiente, objetiva, pronta e imparcial, en la que se identifique y localice a los autores materiales e intelectuales del homicidio. Sin embargo, a dos años de distancia, no se ha resuelto el crimen.