Los Mochis, Sin.– Sinaloa es el lugar donde más mueren las abejas debido al envenenamiento que sufren con los insecticidas y demás plaguicidas con los que se fumigan los cultivos, incluso el año pasado colapsaron más de 5 mil colmenas en el norte del estado por intoxicación de los insectos durante la polinización de arándano, informó el presidente del Consejo Estatal de Productores Apícolas de Sinaloa.
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Jorge Osuna Mendívil añadió que, con el objetivo de frenar la alta mortalidad de estos insectos benéficos, en mayo del 2021 se aprobó una ley que establece dos años para que sean retirados del mercado, es decir, en mayo del 2023, tres de los insecticidas neonicotinoides más dañinos que exterminan a las abejas al intoxicarlas, mientras ellas recolectan néctar y polen de las flores de las plantas fumigadas.
“El año pasado se colapsaron entre cinco mil y ocho mil colmenas en la zona norte, todas ellas polinizando blue berries, arándanos; no hubo demanda porque es acuerdo de los apicultores con los agricultores de llevarles abejas a cambio de un cobro”, indicó.
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El representante de los apicultores en Sinaloa añadió que aunque la fumigación de cultivos con avioneta mata muchas más abejas que la innovadora fumigación con dron, el problema está en la letalidad de las sustancias que contienen los insecticidas utilizados por los agricultores, pues el poder tóxico de estos productos puede permanecer hasta por más de 45 días en la savia de las plantas y ejemplificó el que se usa para el tratamiento de semillas que mata todo tipo de insectos incluyendo abejas.