Mazatlán, Sin.- Gracias a la oportuna intervención de los paramédicos de la Cruz Roja y el apoyo de elementos preventivos, una joven pudo dar a luz a un bebé varón dentro de una vivienda de la Invasión Bugambilias.
Para el coordinador de Socorros de la Cruz Roja, Abimelec Gómez Sánchez, hacerla de partero “fue algo muy bonito el ayudar a esta joven a traer vida y que el bebé llegara con bien”.
Entrevistado luego de ayudar en la labor de parto, dijo que desde que es coordinador de Socorros de la Cruz Roja, es la segunda vez que le toca atender un parto, la primera vez fue el pasado 25 de diciembre a las 05:00 de la mañana.
“Siempre es emoción ayudar a dar vida, tenía las dos ambulancias ocupadas en diferentes emergencias y me tocó salir atender esta emergencia y (estoy) emocionado”, manifestó.
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Gómez Sánchez indicó que para salir a atender esta emergencia se trajo de apoyo a la joven radioperadora de la Cruz Roja de turno y dejó cuidando la línea de emergencia a un voluntario que iba llegando sin uniforme.
Destacó que durante las labores del parto la joven radioperadora estaba sorprendida pero contenta de poder ayudar a la joven madre, sobre todo, porque pudieron dar esa atención y servicio a esa persona.
Explicó que las labores de parto se llevaron a cabo en una casa pequeña de la Invasión Bugambilias, al este de la ciudad, sobre un colchón algo viejito, donde le empezaron los dolores de parto a la joven madre.
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Al reporte acudieron agentes de la Policía Municipal quienes se mostraron muy cooperativos y participativos, por lo que dijo que fue un trabajo coordinado entre Seguridad Pública y Cruz Roja y que no llevó más de 15 minutos las labores de parto.
Gómez Sánchez expuso que no conocieron el nombre de la joven, porque nadie la conocía y estaba muy débil y no les respondía nada, ya que presentó un sangrado abundante, por lo que fue canalizada y le pusieron oxígeno.
“De hecho, pedí otra ambulancia que se desocupó de otra emergencia para que trasladaran a la mamá y yo trasladé al bebé, que está estable, le hacen falta hacerle estudios y eso, ya en una incubadora en el Hospital General para descartar cualquier enfermedad, pero a simple vista, está sano”.
Asimismo, agregó que el bebé podría ser prematuro, pesó un kilo 300 o un kilo 400, además de que la joven madre no llevaba las cuentas.
Tanto la madre como el bebé fueron trasladados al Hospital General de Mazatlán a recibir atención médica.