Los Mochis, Sinaloa. La realidad es que los niveles de las presas del sistema Río Fuerte que lo componen la Huites, la Miguel Hidalgo y Costilla y la Josefa Ortiz de Domínguez, están muy bajos y no pueden arriesgar los volúmenes asignados para el consumo humano, pero por otro lado los trigueros pueden perder sus cultivos, mencionó José Manuel Santos Granillos.
El dirigente del Comité Municipal Campesino número 17 en el valle de El Carrizo, manifestó que a pesar de la adversidad para los productores de trigo, están gestionando que se autorice un volumen para quienes tienen pendiente el segundo riego de auxilio y que el desarrollo de las plantas continúe hasta su cosecha.
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“La situación está muy crítica, las presas no tienen la suficiente agua para garantizar esos riegos que nos faltan y no se puede poner en dificultad el consumo humano, entonces, los módulos están atravesando esta situación porque se agotó su asignación de agua y andamos buscando la manera de que se les pueda surtir”, expuso.
Explicó que el error que ocasionó la situación tan crítica en la que se encuentran los ejidatarios es que los módulos se excedieron en la superficie que se les recomendó confiando en que recuperaría agua a través del sistema de bombeo, pero fue mínima la cantidad que pudieron captar.
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El líder de los campesinos en El Carrizo comentó que el subsuelo no dio para recuperar y no hubo escurrimientos de los predios porque los productores cuidaron al extremo de que no se desperdiciara el recurso, por lo que no fue posible recuperarlo a través del bombeo.
Manifestó que lamentablemente tampoco hubo lluvias en el verano ni en el invierno a pesar de que había pronósticos de que se iban a registrar y por lo tanto las presas no pudieron recuperar sus niveles.
