Guasave, Sinaloa. Sinaloa enfrenta una crisis sin precedentes en sus fuentes de almacenamiento de agua. Según datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), al 17 de febrero de 2025 las presas del estado registran mil 996 millones de metros cúbicos (mm³), lo que representa solo el 12.6 por ciento de su capacidad total.
Esta cifra significa mil 350 mm³ menos que en la misma fecha de 2024, evidenciando una reducción drástica que afecta especialmente al sector agrícola.
Te podría interesar: La temporada de siembras primavera-verano es inviable en Sinaloa por la sequía: Caades
El impacto es aún más grave si se considera que Sinaloa destina el 94.1 por ciento de su agua al riego agrícola, muy por encima del promedio nacional del 76 por ciento, dio a conocer el analista agropecuario Samuel Sarmiento Gámez. Con estos niveles de almacenamiento, la incertidumbre crece para los productores que dependen de este recurso para sostener sus cultivos.
El nivel actual de almacenamiento es el más bajo en los últimos 30 años, según los registros históricos. En contraste, el promedio de los últimos tres decenios ha sido del 48.1 por ciento lo que muestra un desplome sin precedentes en la disponibilidad del agua en el estado, explicó.
Sugerido: Es imposible que las presas se recuperen para el 30 de septiembre: Sader prevé otra sequía
El descenso en los volúmenes de las presas se ha visto agravado por factores como la reducción de lluvias, la sobreexplotación del recurso y la falta de infraestructura para su óptimo aprovechamiento. Expertos advierten que, de no tomarse medidas urgentes, Sinaloa podría enfrentar restricciones severas en el suministro de agua para riego y consumo humano en los próximos meses.
El sector agrícola sinaloense, que es un pilar fundamental de la economía estatal y nacional, podría verse afectado con reducción en la producción de granos y hortalizas, lo que impactaría tanto en el abasto local como en las exportaciones.
Sigue la información agropecuaria en nuestra sección especial de Línea Directa
Samuel Sarmiento Gámez, asesor de mercados y especialista en agroindustria, advierte que la escasez de agua podría encarecer los costos de producción y reducir las áreas sembradas en el próximo ciclo agrícola.
Ante este panorama, productores y expertos hacen un llamado urgente a las autoridades para implementar estrategias de conservación del agua, modernización de los sistemas de riego y una mejor gestión del recurso hídrico para mitigar los efectos de esta crisis.