Culiacán, Sin.- A tres semanas de que Juan Carlos Sánchez Palacio fue asesinado en medio de un enfrentamiento entre civiles armados, en unos departamentos del sector Desarrollo Urbano Tres Ríos, familiares acudieron a interponer una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).
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En entrevista con medios de comunicación, su esposa Michel Esquerra Meza contó que decidieron interponer la queja ya que después del hecho, ninguna autoridad se ha acercado a proporcionarles ayuda ni información sobre cómo va el caso, además que no han podido regresar al departamento.
Narró que la tarde del 21 de septiembre, se encontraban ella y su hija de meses de edad al interior de su vivienda, cuando se empezaron a escuchar detonaciones de arma de fuego.
Cuando ya no se oyeron, en eso llegó su esposo para ayudarlas a salir del lugar, sin embargo, al escucharse de nueva cuenta las ráfagas, decidieron refugiarse.
Después, dos civiles armados, uno de ellos herido, ingresaron a su departamento, acto seguido, les pidieron que se metieran a una habitación y que se mantuvieran en el suelo, mientras uno seguía repeliendo la agresión.
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Contó que el hombre herido le solicitó un botiquín, con el que se comenzó a curarse, mientras se mantenía escondido con ellos.
Señaló que por un momento se detuvo el enfrentamiento, uno de los presuntos delincuentes quebró el cristal de la ventana y por ahí salieron.
Después de un silencio, percibieron el ruido de las sirenas de las patrullas, y posteriormente notaron que alguien había lanzado gas lacrimógeno, por lo que Juan Carlos optó por salir a pedir ayuda.
En ese momento, Michel escuchó una fuerte detonación y ya no supo nada de su esposo. A los minutos, militares entraron a su vivienda y les pidieron que salieran; cuando caminó lo primero que observó fue un charco grande de sangre.
Señaló que partió con su bebé en brazos, mientras era escoltada por mujeres policías, y al voltear a la izquierda se dio cuenta que los elementos de seguridad tenían un cuerpo desnudo en el suelo, el cual en su momento desconoció porque Juan Carlos no portaba ropa, pero después constató que se trataba de él.
“Salgo del departamento y había un charco de sangre muy grande, y seguía una vaya de policías. Nos escoltan dos policías hasta afuera de los departamentos, se percatan que estábamos llenas de humo. Cuando salgo de ahí, volteo hacia mi izquierda y veo cómo tienen un cuerpo que estaba totalmente desnudo, quise pensar que no era él”, dijo.
Su hermano declaró que lo que buscan es que el Gobierno reconozca que no es un delincuente, que se trató de una víctima colateral y que se repare el daño integral.
Aproximadamente a las 16:00 hora del sábado 21 de septiembre, personas que se encontraban por este sector reportaron detonaciones de arma de fuego, además una cortina de humo proveniente de unos departamentos.
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La balacera entre civiles armados se extendió por casi una hora, lo que generó pánico en la población que se encontraba en la zona, además caos en las calles por las personas que huyeron a refugiarse.
La Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) informó que derivado de este hecho, tres civiles armados fueron abatidos, presuntamente entre estos Juan Carlos, y dos militares resultaron heridos.
A través de redes sociales, usuarios, familiares y amigos, pidieron justicia por la muerte de Juan Carlos, donde aseguraron que no era un delincuente.