Mazatlán, Sin.- La santa misa de Pascua es para celebrar que Jesús pudo vencer al pecado y a la muerte con su resurrección, dijo el Obispo Mario Espinosa Contreras, durante la celebración eucarística de este domingo en la Catedral Basílica de la Inmaculada Concepción.
En la homilía, el presbítero llamó a los feligreses a seguir el ejemplo de Jesús, y cumplir con la Pascua, haciendo una transición de cosas negativas a positivas, y puso como ejemplo a México y el grave problema de violencia que vive actualmente.
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“La pascua de ser violento a ser pacífico; cómo necesitamos esa pascua en nuestra patria que se ha deteriorado tanto la paz. Por desgracia es de las realidades donde ha habido un proceso de retroceso grandísimos, allá cuando nosotros estábamos en los años 60, era otro mundo, un servidor iba a la escuela de niño, no me pasaba nada.
Señaló que en esa época, el país vivía en paz, pero por desgracia se perdió y ésta ha sido una de bajas más grandes que ha tenido la cultura mexicana.
También exhortó a los asistentes a hacer cambios pasando del alcoholismo a la sobriedad, de la drogadicción a vivir limpio, de la envidia a mirar con buenos ojos a los demás, de la pereza a la diligencia y del egoísmo a la generosidad, emulando la muerte y resurrección de Jesús.
Espinosa Contreras relató los hechos ocurridos tras la muerte y sepultura de Jesús, y cómo al tercer día, María, Juan, María Magdalena y otras mujeres, acudieron a la última morada del Señor, para ser testigos de que Cristo había resucitado venciendo la muerte y el pecado.
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“Con lo cual ellos dan ese testimonio que les alegró el corazón, les renovó la fe, les afirmó su esperanza, animó su caridad. Y durante los días posteriores, como nos lo dice el testimonio del discurso de Pedro, a algunas personas se les manifestó el Señor, glorioso y resucitado”.
