Los Mochis, Sin.– De acuerdo a las sentencias emitidas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en México subsiste la violencia estructural, múltiple y sistemática hacia la mujer, provocando que, en los delitos de razón de género, persista la impunidad.
María de Rosario Molina González, investigadora y líder del cuerpo académico de la Universidad de Sonora –Unison– señaló que este fenómeno se puede observar en las estadísticas de feminicidio del país, donde algunos han tenido que ser reclasificados al fallar las instituciones procuradoras de justicia en consolidar la carga de prueba con perspectiva de género.
“Si analizamos las estadísticas, de manera transversal, lo que es feminicidio, homicidio doloso y homicidio culposo, hay cifras que son muy significativas de cambios. ¿Qué es lo que ocurre cuando se llega a judicializar? Se judicializa y hay inclusive reclasificaciones jurídicas”, dijo la investigadora de la ciencia jurídica a Línea Directa.
Puedes leer: Firman convenio de colaboración científica UAS, Unison y la Universidad de La Habana
La doctora Molina González señaló que las reclasificaciones se deben a deficiencias en el manejo de la investigación, debido a que el personal de las fiscalías o procuradurías a cargo del proceso, no cuentan con la sensibilidad de atender este tipo de casos, porque, ellos mismos, están envueltos en un constructo de violencia de género que es normalizado.
“Estamos teniendo eslabones muy débiles y hay proceso en los cuales se requiere la capacitación, si lo sigue realizando la investigación un Ministerio Público que tiene una alta carga patriarcal formado bajo este esquema cultural con roles y estereotipos de género, pues, bueno, la investigación difícilmente va dar un giro hacia allá”, explicó la investigadora de la Unison.
Te puede interesar: ¡Habrá jalón de orejas! Congreso buscará Centro de Conciliación en Guasave y más personal en oficinas
Además, agregó que en temas de feminicidio se presentan procesos de estigmatización, criminalización, de culpabilizar a la mujer, como se observó en una sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos por el caso “mujeres víctimas de tortura sexual en Atenco”, donde los policías señalaron que la violación había ocurrido porque no estaban en sus casas.
Esta misma visión de la violencia de género se observa en la sociedad y medios de comunicación que sobreexponen a las víctimas mujeres, e incluso se ventila la vida personal con el fin de justificar sus homicidios.
Por ello, enfatizó que es urgente trabajar en la deconstrucción de la perspectiva de género en la sociedad, en todas sus esferas, para lograr minimizar, en la medida de lo posible la violencia hacia las personas vulnerables y los feminicidios.