Mazatlán, Sin.- Sin brindar detalles, pero sí de que pronto volverá a estar en las labores de ayuda y apoyo a los sectores más vulnerables de Mazatlán, Gabriela Peña Chico aseguró que se alista para extender la mano y no dejar en el abandono a las personas que ocupan de la asistencia.
La expresidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia en Mazatlán, que hace un mes fue destituida de este cargo, afable atendió este miércoles a los reporteros que se toparon con ella en un conocido restaurante del puerto, donde dijo que pronto, a más tardar en julio dará a conocer los aspectos de lo que hará junto con un grupo de amigos, en la asistencia social.
“Vamos a continuar haciendo lo que nos gusta, lo que nos apasiona, y lo que me motiva todos los días a levantarme, definitivamente es el servir y servir a la sociedad en estos casi cuatro años que estuvimos trabajando muy de cerca con las personas en situación vulnerabilidad, conocemos las zonas, conocemos qué le duele a la gente y a esa gente queremos llegar, a esa gente queremos continuar apoyando porque me considero comprometida con ellas”.
Peña Chico descartó tener una invitación del Gobierno del Estado o alguna otra dependencia para sumarse a la función pública, ya que por lo pronto está concentrada en atender su persona como la de su familia, además de retomar de alguna manera su vida social con sus amigos.
Vestida de blusa color fucsia, pantalón negro y calzado cómodo, sin dejar de lado su rostro maquillado, y sonriente en todo momento, la expresidenta del DIF, prometió que, en su momento, en unos días más ofrecerá una rueda de prensa donde brindará toda la información de lo que hará en lo futuro, al encabezar una agrupación para ayudar a los demás.
Peña Chico acudió a un restaurante del puerto, donde sostenía un convivio personal con sus amigos y su hijo, donde amablemente accedió a atender una entrevista de banqueta con reporteros que toparon a su paso.