Los Mochis, Sin. – En este año que termina, al culminar un ciclo más de vida, en primer lugar, debemos agradecer a Dios su benevolencia y amor en favor de todos nosotros, expresó en su mensaje para el auditorio de Línea Directa el Padre Ramón Alberto Ibarra Ayala, Rector del Seminario de Culiacán.
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El sacerdote católico destacó que como quiera que haya sido el camino y las condiciones de la existencia en el 2022: alegre o triste, fecundo o estéril, hay que decirle a Dios te damos gracias Señor, hacer a un lado los momentos tristes y traer a nuestra mente los buenos gestos que hemos tenido para con el prójimo o que nos han brindado los demás.
“Te damos gracias Dios porque no hay cosa más grande que bendecir a Dios, ahora que termina este año hagamos a un lado la triste noticia y traigamos a nuestra mente los buenos gestos que hemos tenido para con los demás o que nos han brindado los demás “.
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En este año que termina se debe recordar el trabajo diario que hemos soportado con fidelidad y paciencia por la familia y amistades, especialmente por los que no piensan, ni sienten, ni creen como nosotros, añadió el Padre Ramón.
El último día del año es un momento para hacer una reflexión y decirle a Dios GRACIAS, así como confiar en su misericordia para el 2023, destacó el Padre Ramón Alberto Ibarra Ayala, Rector del Seminario de Culiacán.