Campo 35, Sin.- Los jornaleros indígenas tarahumaras de la cuartería del Campo 35 que denunciaron ser presuntamente víctimas de explotación laboral, ya partieron a sus comunidades de origen, en Chihuahua, tras la intervención de Gobierno del Estado para garantizar sus derechos humanos y como trabajadores.
Por instrucciones del gobernador Rubén Rocha Moya, la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Sustentable que dirige María Inés Pérez Corral, fue quien directamente Intervino para atender inmediatamente al grupo de jornaleros indígenas migrantes que solicitó la protección de sus derechos laborales.
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Fue gracias a la intervención de Sebides que el primer grupo de tarahumaras que denunció ante el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas que el contratista, originario del Campo 35, quería pagarles solamente 4 mil pesos por dos meses de trabajo, que se logró un salario total justo.
Sin embargo, durante la revisión del caso, Sebides detectó algunas situaciones de vulnerabilidad en la cuartería en la que estaban hospedados, por lo que se garantizó durante su estancia por 4 días, apoyos de despensas, cobijas, abanicos, agua purificada y comida caliente.
Asimismo, ante la solicitud de los jornaleros se les brindó ayuda para regresar a sus comunidades y, sábado, partieron a Ciudad Cuauhtémoc, Chihuahua, 61 personas, de ellas: 8 son bebés, 10 niños, 28 hombres y 15 mujeres.
“Los jornaleros del Campo 35 ya partieron a sus lugares de origen, a Chihuahua, van directo a Ciudad Cuauhtémoc. Son 61 personas las que partieron. El gobernador estuvo siempre preocupado por las necesidades de estas personas y que se les respetaran sus derechos humanos y se les dieran un trato digno también por sus instrucciones”, dijo María Inés Pérez Corral.
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A este caso, también se sumó la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sinaloa, autoridad que abrió una carpeta de investigación por el posible delito de trata de personas con fines laborales y con una traductora se les tomó su declaración a cada uno de ellos.
La Dirección de Trabajo y Previsión Social de la Zona Norte intervino en la mediación obrero-patrón, logrando el pago justo por el trabajo desempeñado de los jornaleros tarahumaras tanto en Sinaloa como en campos agrícolas de Sonora.
Fue a las 16:30 horas de este sábado que el grupo de trabajadores agrícolas migrantes partió en dos autobuses hacia Chihuahua con alimentos y agua para el camino.
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