EU.- Un investigador de Seattle ha encontrado archivos eliminados de Google Cloud que revelan algunos de los primeros casos de COVID-19 en Wuhan, con esta nueva información no sugieren que el virus se filtró de un laboratorio de alta seguridad en Wuhan, ni un evento de propagación de origen natural, pero sí reafirman la idea de que el nuevo coronavirus circulaba antes del supuesto primer brote importante.
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Para saber cómo y dónde se originó el virus, se debe encontrar el llamado virus progenitor, aquel del que descienden todas las demás cepas que hasta ahora, las primeras secuencias son principalmente las que se tomaron como muestra de casos en el mercado de mariscos de Huanan en Wuhan, pues aquí se tenía reportado que surgió el virus.
Sin embargo, los casos de principios de diciembre y noviembre de 2019 no tenían vínculos con el mercado, lo que indica que, bastante temprano en la pandemia, el virus surgió de otro lugar.
Jesse Bloom del Instituto Médico Howard Hughes en Seattle descubrió que las secuencias eliminadas, probablemente algunas de las primeras muestras, que también carecían de esas mutaciones.
“Son tres pasos más similares a los coronavirus de murciélago que a los virus del mercado mojado de Huanan”, dijo Bloom.
“Estos nuevos datos sugieren que el virus estaba circulando en Wuhan mucho antes, este hecho sugiere que las secuencias del mercado, que son el foco principal de la epidemiología genómica en el informe conjunto OMS-China, no son representativas de los virus que circulaban en Wuhan a fines de diciembre de 2019 y principios de enero de 2020, escribió Bloom
Según Zimmer, hace aproximadamente un año, 241 secuencias genéticas de pacientes con coronavirus habían desaparecido de una base de datos en línea llamada Sequence Read Archive que mantienen los Institutos Nacionales de Salud (NIH). Bloom notó las secuencias faltantes cuando se encontró con una hoja de cálculo en un estudio publicado en mayo de 2020 en la revista PeerJ en el que los autores enumeran 241 secuencias genéticas de SARS-CoV-2 hasta fines de marzo de 2020; las secuencias eran parte de un proyecto de la Universidad de Wuhan llamado PRJNA612766 y supuestamente se cargaron en Sequence Read Archive.
Después de buscar las secuencias, recibió el mensaje «No se encontraron elementos». Bloom no pudo encontrar ninguna explicación de por qué se habían eliminado las secuencias, y sus correos electrónicos a los dos autores correspondientes para preguntar no recibieron respuesta.
“No hay una razón científica plausible para la eliminación: las secuencias son perfectamente concordantes con las muestras descritas en Wang”, escribió.