Sergio Ramos, un jugador histórico en la franquicia del Real Madrid, ha llegado al futbol mexicano precedido de una intensa y mediática campaña publicitaria. La prensa, sobre todo, ya lo coloca como el fichaje bomba del año y como uno de los tres jugadores con brillante carrera que se suman a la Liga Mx de futbol.
El defensor español vestirá la camiseta de los Rayados del Monterrey y se convertirá en el imán de taquilla para las plazas donde el cuadro regio se presente, amén del lleno casi asegurado que le generará al equipo en su propia casa.
Para muchos este fichaje no pasa de ser una simple mercadotecnia. A sus 39 años que habrá de cumplir el 30 de marzo próximo, Ramos no podrá ofrecer ni desplegar el mismo futbol que lo llevó a convertirse en un jugador icónico en su país y de la selección española. Pero el legendario futbolista confía en su capacidad y ha prometido que se entregará en la cancha como si fuese un novato.
Pero, ¿es Ramos la solución para que Monterrey abandone esos últimos lugares en la tabla y poco común en ellos? La temporada, al menos en los seis primeros juegos disputados, no ha sido la que este equipo, con el mejor poder económico de todo el circuito, se había trazado.
Seis míseros puntos de 18 disputados, es una cifra no acorde a la calidad de plantel que tienen los regios y al que ahora se ha sumado la estrella española. Pero la experiencia de Sergio puede resultar importante y fundamental en una zaga que ha recibido una decena de anotaciones. Se trata de un promedio de más de dos goles por encuentro.
¿A quién sacrificarán los Rayados para colocar a Ramos en esa línea defensiva? ¿Acaso será el sinaloense Héctor Moreno quien no ha estado en el once de inicio en los últimos tres encuentros?
No podemos esperar que Ramos eche raíces en México. Su ciclo como futbolista activo podría terminar aquí, posiblemente en esta temporada o una más. Pero su presencia en las canchas le dará un plus a esta Liga carente de grandes jugadores y de aquellos que dejaron huella por el planeta, como el brasileño Ronaldinho que jugó una vez con el Querétaro.
Ramos junto al colombiano James Rodríguez son ahora los fichajes más grandes. El primero tiene que demostrar el atrevimiento que tuvo el Monterrey, mientras que el segundo ya comenzó a rendir frutos desde su primer contacto con el León, al que está ayudando a permanecer en la cima.
¡Bienvenido pues, jugadores de este calibre!, que mucha falta le hace al futbol de nuestro país, cuya Liga ha perdido mucha credibilidad y calidad. Pero también, ojalá que su fichaje no resulte en un cartucho quemado como el de Javier “Chicharito” Hernández, quien llegó a Chivas para sobrecalentar la banca y enseñarnos todo tipo de lesiones que puede sufrir un jugador que está más para el retiro que para otras cosas.
