Los Cerveceros de Milwaukee se convirtieron en el primer equipo en asegurar un boleto a la postemporada en las Grandes Ligas, por encima de otras novenas con mejor promedio de ganados y perdidos. La escuadra suma su cuarto banderín de la División Central en la Liga Nacional, con un festejo no en la cancha, sino en el vestidor, ya que minutos antes de iniciar su juego de este miércoles los Cachorros habían perdido su juego ante Oakland y eso los alejaba a 10 juegos del primer lugar, el mismo número de encuentros que le restan al calendario regular.
Filis, Dodgers, Yanquis y Orioles, equipos con un récord superior al de Milwaukee, tendrán que batallar otro poco en esta recta final, sobre todo Los Angeles, a quien los Padres de San Diego se han convertido en su inseparable sombra después del juego de las estrellas en la disputa por el título de la división Oeste.
Estos números y posiciones son puntos que considero inconsistentes en el sistema de Grandes Ligas, desde que desapareció aquel añejo procedimiento donde el campeón de cada Liga (Americana y Nacional), avanzaban directo a la Serie Mundial.
Las Mayores le buscó adecuaciones para buscar más participación de equipos en postemporada, con el paso del tiempo, porque consideraron muy arcaico, inaceptable y poco redituable, que solamente dos escuadras se enfrentaran por el máximo galardón después de 162 encuentros.
El primer cambio que se patentó fue dividir las Ligas en tres zonas, avanzando el campeón de cada una de ellas, junto con el mejor segundo lugar en un standing general. Allí nació la especie de semifinal por circuito y se perdió el legítimo derecho a competir en el clásico de otoño a quien fue el mejor en toda la campaña.
Pero transcurrieron algunos años más y consideraron que un comodín no era suficiente. Abrieron el camino para otros dos más y provocó que un campeón de división (el tercero mejor), se vea inmiscuido en el repechaje contra el tercer comodín.
Milwaukee solo es superado por Filis y Dodgers en cuanto a ganados y perdidos hasta antes de la jornada del miércoles, pero con una decena de juegos por disputarse, tienen todavía la oportunidad de eludir esa instancia, ya sea desbancando a Filadelfia o Los Angeles en un standing general.
Para los Dodgers, por el trabuco que se mandan, sería un golpe muy fuerte tener que pelear su avance en una serie de tres partidos, a ganar dos, contra el tercer comodín en un hipotético caso de terminar como el tercer mejor campeón de división. Creo que eso, y en caso de quedar eliminados, le terminaría costando la cabeza a Dave Robert, el manager que desde hace dos campañas trabaja en el banquillo con una guillotina sobre su cabeza.
