Pese a las remarcadas peticiones y protestasque han hecho los comerciantes del mercado Garmendia (y pese a las críticas del diputado panista Carlos Castaños), el alcalde de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, fue tajante ayer y aseveró que de momento no se reactivará la circulación vehicular el centro de la ciudad.
El munícipe fue enfático al decir que no pueden anteponer un interés económico, laboral o particular al interés de la salud y de la vida de muchas personas, por lo que le pidió a los comerciantes comprensión y paciencia, así como ya no hacer bloqueos y manifestaciones en la avenida Álvaro Obregón, frente al Ayuntamiento, porque están afectando a terceros.
Sin duda este es un tema complejo y de nuevo pone de relieve la dificultad de poner en una balanza la economía y la salud. Se entiende el desespero de los locatarios y de todos los dueños de negocios, pero no se puede negar que en Sinaloa aún estamos en una etapa muy difícil de la pandemia de COVID-19.
Las cifras lo reflejan: este jueves hubo un récord en los nuevos casos, 286 en un solo día, y si bien algunos son rezagados, no se puede negar que el riesgo de contraer el virus sigue ahí afuera, latente, por lo que no se pueden relajar las medidas de manera tan drástica.
“Pequeña obra pero de gran relevancia social”. Así describió el gobernador Quirino Ordaz el nuevo acceso del bulevar Miguel Tamayo, que lo conectará con la carretera a Bacurimí, y el cual fue inaugurado este juevesen beneficio de miles de habitantes del sector norponiente de Culiacán.
Y en efecto, cuando el mandatario estatal habla de “pequeña obra” se refiere a su longitud, pues el nuevo tramo es de apenas 200 metros, pero vaya que servirá de mucho para aliviar la carga vehicular en esa zona, que estaba “ahorcada” por falta de accesos.
Además, no fue cosa menor la gestión que hubo que realizar ante la Secretaría de Comunicaciones y Transportes para que la calle pudiera atravesar la vía del tren, y tampoco la compra de los terrenos necesarios, pues durante años los dueños se negaban a venderlos. Así que enhorabuena por este nuevo tramo vial, cuya inversión fue de 27 millones de pesos (que incluye la compra de terrenos) y beneficiará a más de 50 mil “culichis” directamente…
Negras se las están viendo los habitantes de Los Mochis con los problemas de baja presión o hasta desabasto de agua potable durante los últimos días, algo por demás preocupante por ocurrir justo en medio de la contingencia sanitaria, cuando la higiene es vital.
Según explicó el gerente de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Ahome, Guillermo Blake, el problema consiste en que se necesitan instalar nuevas bombas para normalizar el suministro de agua cruda a las plantas potabilizadoras de la ciudad. La pregunta obvia es entonces, ¿cuándo estarán listas dichas bombas? Y he aquí el problema: nadie sabe, nadie supo, ni siquiera Don Guillermo.
El titular de la Japama reconoció que esto “va para largo” pues dichos artefactos pueden tardar hasta un mes (cosa de nada) en llegarles, y a eso hay que sumarle que tienen problemas económicos. Plop. Mientras tanto, que los mochitenses se aguanten y se las arreglen con poca agua. ¿Y qué dice a todo esto el alcalde Manuel Guillermo Chapman? Ni forma de saberlo porque ni siquiera ha asomado la cara en toda la semana…
Ya se les acabó la paciencia a los productores agrícolas de Sinaloa al no ver una respuesta clara por parte del gobierno federal para garantizarles los 4 mil 150 pesos del precio de garantía para la tonelada de maíz, por lo que ya preparan una mega protesta el próximo martes en diferentes carreteras del estado.
Gustavo Rojo Plasencia, presidente de la Caades, indicó que luego de acordar con los líderes de organizaciones del sector social y privado, se determinó salir desde El Carrizo hasta el valle de Elota para manifestarse, pero eso sí, para no romper la sana distancia, cada quien estará arriba de sus unidades, ya sea en tractores, automóviles o camiones.
El presidente de Caades indicó que esta es una movilización para que se vea que prevalece la preocupación por el temor de que no se puedan cumplir con los compromisos financieros ya que el mercado no es favorable para los maiceros y que no hay conformidad con la mecánica de Segalmex para darles el incentivo. Ya veremos qué respuesta y cómo gestiona esto el gobierno federal. Así se las gastan. O peor… Comentarios: [email protected]