El proceso electoral para elegir al próximo rector o rectora de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) está en marcha, y las expectativas parecen centrarse en dos figuras que se perfilan para ocupar el cargo: Jesús Madueña Molina, actual rector, y Denisse Díaz Quiñones, profesora e investigadora en la Facultad de Derecho.Sin embargo, aunque la contienda promete ser interesante, existen factores que ponen en perspectiva la paridad entre ambos contendientes, especialmente cuando se considera que Díaz Quiñones aún no está registrada como candidata.
Jesús Madueña: la apuesta por la continuidad
Por un lado, Jesús Madueña Molina, quien ha sido rector desde 2021, tiene la ventaja de la experiencia que le otorgan más de cuatro años al frente de la universidad. Su gestión se ha caracterizado por la implementación de proyectos de infraestructura, la mejora de algunos servicios y la consolidación de la UAS en el contexto regional.
No obstante, su administración también ha enfrentado críticas, sobre todo en términos de transparencia. Su interés por la reelección responde, en parte, a la necesidad de continuar con proyectos inconclusos, pero también refleja la visión de un sector que prefiere mantener la estabilidad ante los retos que enfrenta la universidad.
Denisse Díaz: una alternativa renovadora
Por otro lado, Denisse Díaz Quiñones, aunque aún no se ha registrado oficialmente, ha manifestado su interés en competir. Con una carrera sólida como profesora e investigadora en el área de posgrado, Díaz Quiñones representa una opción fresca, con un enfoque en mejorar la calidad educativa y fomentar una mayor inclusión de todos los sectores de la comunidad universitaria.
Sin embargo, su posible candidatura enfrenta desafíos significativos, especialmente porque no cuenta con la misma visibilidad política ni con los mismos apoyos institucionales que Madueña Molina. Además, la incertidumbre sobre su participación deja en claro que, al menos en este momento, su proyecto podría estar en desventaja frente al actual rector, quien cuenta con el respaldo de su administración y con la estructura política que lo respalda.
Factores políticos dentro de la universidad
La elección del rector o rectora de la UAS no solo estará determinada por la figura que encabece cada candidatura, sino también por el contexto político dentro de la misma universidad.
En este sentido, el actual rector, Madueña Molina, tiene la ventaja de haber establecido una red de relaciones tanto dentro como fuera de la institución, lo que podría darle una ventaja significativa en términos de apoyo institucional y votos de sectores clave como trabajadores, académicos y estudiantes.
Por su parte, Díaz Quiñones representa una opción renovadora, cuyo enfoque académico y propuesta de mayor inclusión podrían atraer a aquellos que buscan un cambio en el rumbo de la universidad.
Decisión clave para la comunidad universitaria
La participación activa y el interés de los diferentes sectores de la UAS serán determinantes para definir qué modelo de gestión desean para la universidad.
Mientras algunos abogan por la estabilidad y continuidad que representa Madueña, otros podrían considerar que una nueva propuesta académica es lo que la institución necesita para dar el siguiente paso en su desarrollo.
Lo cierto es que la contienda por la rectoría apenas comienza y, aunque las cartas parecen estar sobre la mesa, las circunstancias actuales sugieren que el proceso será dinámico y podría dar giros inesperados conforme se acerque la fecha de la elección.
Fechas clave del proceso:
• 2, 3 y 4 de abril: Comparecencias públicas.
• 7 de abril: Comparecencias privadas.
• 9 de abril: Votación directa de la comunidad universitaria, con una jornada de 8:00 a.m. a 6:00 p.m.
• 11 de abril: Entrega de resultados en sesión del Consejo Universitario.
En resumen, la competencia está abierta, pero el escenario actual favorece al rector en funciones, Jesús Madueña Molina, quien parte con la ventaja de la experiencia y el respaldo institucional.
No obstante, la posibilidad de una nueva propuesta representada por Denisse Díaz Quiñones ofrece una alternativa que podría generar un debate interesante sobre el futuro de la universidad.
