México.- Luego del incendio que resultó en el fallecimiento de 40 personas migrantes en una de las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) en Ciudad Juárez el pasado 27 de marzo, el presidente Andrés Manuel López Obrador continúa en la espera de que la investigación que se lleva a cabo sobre lo ocurrido culmine, sin embargo, dio a conocer un par de detalles más sobre ese día.
“Todo indica de que una protesta, le prenden fuego a unas colchonetas y se produce un incendio, pero sobre todo, hay intoxicación, porque la puerta estaba cerrada, porque quien tenía la llave no estaba. Desde luego, quienes prendieron fuego no estaban pensando en que la puerta estaba cerrada, porque nadie actúa de esa manera, no van a suicidarse, no, era una protesta y lamentablemente sucede esta desgracia”
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Retomando el mismo tema de migración, el mandatario federal comunicó que los accidentes son problemas constantes que afectan la vida de quienes migran hacia México, destacando eventos como lo ocurrido en Chiapas o el presunto secuestro en Matehuala, SLP por parte de grupos delincuenciales.
“Constantemente tenemos problemas de accidentes en tráileres, recientemente en Chiapas, también perdieron la vida muchos migrantes. Acaba de suceder en San Luis Potosí, Matehuala, una situación de secuestro de migrantes por la delincuencia organizada”
“Siempre hemos planteado buscar, ofreciendo trabajo, albergue, atención, mantener en el sureste a los migrantes, porque la travesía al norte es riesgosa en extremo. Entonces tenemos que buscar opciones alternativas”
López Obrador también declaró que se encontraba trabajando junto al padre Alejandro Solalinde, con quien creará un consejo para que se protejan los derechos humanos de los migrantes y hechos como lo ocurrido en Ciudad Juárez no se repitan de nuevo.
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