Ciudad de México. Autoridades de la CDMX quedaron expuestas el pasado 21 de febrero al detener a un hombre de 67 años por plantar un árbol en la alcaldía Benito Juárez. El detenido fue identificado como Alfredo Carrillo, un ecologista que solo buscaba mejorar el entorno con más áreas verdes.
Lo llamativo de esta nota es que, para detenerlo, la alcaldía desplegó un operativo en el que participaron tres patrullas y más de 10 policías, una respuesta que muchos consideran desproporcionada.
Presuntamente, Carrillo abrió una banqueta para sembrar un árbol como parte de un proyecto ambiental respaldado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Universidad de Chapingo.
“Fue una instrucción verbal, alguien ordenó detenerlo sin justificación”, denunció en redes sociales Gustavo Carrillo, hijo de Alfredo.
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Trascendió que, durante las casi 72 horas que permaneció detenido, al señor se le negó en repetidas ocasiones el medicamento para la hipertensión, lo que puso en riesgo su salud.
“El asesino de banquetas” fue trasladado al Reclusorio Norte, donde permaneció en condiciones de hacinamiento junto a otras personas acusadas de delitos graves.
El caso de Alfredo Carrillo llamó la atención en redes sociales, donde se generaron numerosos comentarios acusando a la alcaldía Benito Juárez de una detención desproporcionada e ilegal.
