México.- Cada 12 de octubre se conmemora el llamado “Día de la raza” en varios países de América Latina, pero lo cierto es que, más allá de ser una fecha celebraciones, este debería ser un día para reflexionar sobre el concepto de su festividad y apropiarse un poco del trasfondo histórico a partir del cual surgió dicho evento.
El origen del “Día de la raza” se remonta al 12 de octubre de 1492, momento en el cual ocurrió el intercambio de culturas entre europeos y americanos, justo después de la llegada de Cristóbal Colón con sus hombres a la isla Guananí, en el archipiélago de las Bahamas. Aunque algunos conocedores del tema argumentan que, por la diferencia de calendarios, la fecha sería más precisamente entre los días 20 y 21 del mismo mes.
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Pero más allá de los detalles formales, ese fue considerado el “primer encuentro entre dos mundos”, pues indígenas y mestizos provenientes de todas las regiones de América Latina, tuvieron una interacción directa con los europeos. No obstante, para muchos esto no es motivo de celebración, pues la llegada de los españoles tuvo implicaciones sociales, económicas y culturales de todo tipo, las cuales se ven reflejadas incluso en la actualidad.
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¿Por qué no celebrar el día de la raza?
Hay quienes consideran que el Día de la Raza, más que una celebración, es un recordatorio de la imposición de una cultura, leyes, costumbres y una conquista que se llevó a su paso parte de las tradiciones que tenían las comunidades ya asentadas en ese momento.
Más que ser un encuentro de dos culturas, el 12 de octubre de 1942 inició un proceso de colonización por parte de los europeos, quienes destruyeron culturas nativas americanas y, a su vez, procedieron a un saqueó de los recursos naturales, metales preciosos, entre otros aspectos.
En este sentido, hay quienes argumentan que esta fecha no es otra cosa que la alusión a un proceso de violenta imposición cultural, política y militar, el cual incluyó el exterminio de millones de personas, así como la estigmatización y discriminación histórica más absoluta de pueblos y culturas.
No obstante, hay algo que sí se debe reconocer de este acontecimiento histórico y es la resistencia indígena y la lucha de aquellas personas que quisieron mantener sus principios y sus tradiciones, incluso arriesgando sus vidas frente a los europeos que arribaban en el territorio. Pero, de acuerdo con expertos, daría lo mismo hablar del Día de la Raza, Día de la Resistencia Indígena o del encuentro de dos culturas, pues lo importante es señalar la contradicción en esta conmemoración.
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En síntesis, el 12 de octubre de cada año se conmemora oficialmente el Día de la raza, pero tiene significados diferentes dependiendo de la perspectiva en que se aprecie, pues lo que para muchos es una celebración para otros es un prohibido olvidar el dolor y la lucha de un pueblo.
