?México.- El presidente Felipe Calderón inicia esta noche una gira de trabajo en Estados Unidos para reunirse con el presidente Barack Obama,
con el tema de seguridad como central en la agenda, asunto en el cual
el mexicano planteará que “ambos países actúen con corresponsabilidad,
confianza y respeto”.
“El encuentro servirá para reafirmar el compromiso
político con la agenda de cooperación entre ambas naciones y para fijar
metas y prioridades adicionales para los siguientes meses”, estableció
Los Pinos hoy.
Calderón se reunirá esta noche en Washington con más de 20 directivos de empresas transnacionales con sede en Estados Unidos, convocados por la Embajada de México en Washington.
En un diálogo informal, el Primer Mandatario expondrá su visión sobre
las oportunidades de negocios que México ofrece a la inversión
productiva y al intercambio comercial, informó la casa presidencial.
Mañana inicia el día con una reunión con organizaciones mexicoamericanas
asentadas en Estados Unidos, luego se entrevistará en la Casa Blanca
con Obama, tras lo cual hablarán ante los medios del
resultado de sus pláticas; enseguida, el mandatario mexicano se reunirá
con el congresista John Boehner (Republicano de Ohio), presidente de la
Cámara de Representantes desde el pasado 20 de enero, y cerrará el día
con una ponencia coauspiciada por el Woodrow Wilson International Center
for Scholars y el Council of the Americas, sobre los avances de las
políticas de su Gobierno y las perspectivas de la economía nacional.
Los objetivos de la visita de trabajo, según la Presidencia de la
República, son responder a una invitación de Obama hecha “semanas atrás”
para revisar la agenda bilateral.
Calderón “enfatizará la preocupación del gobierno mexicano por la
reciente aprobación de leyes locales de corte antiinmigrante, buscará
oportunidades de cooperación en la materia y promoverá un enfoque
integral sobre el fenómeno migratorio”.
En materia de seguridad, Los Pinos precisó que “se dará continuidad al
diálogo entre presidentes, a fin de que ambos países actúen con
corresponsabilidad, confianza y respeto”.
Esta reunión es el quinto encuentro bilateral entre los presidentes Calderón y Obama.
Los mandatarios revisarán los compromisos e iniciativas bilaterales acordadas en la Visita de Estado a Estados Unidos que realizó el Presidente Calderón en mayo pasado, durante la visita de Estado de Calderón, informó la casa presidencial.
Asimismo, analizarán los avances en los principales temas de la agenda
bilateral, incluyendo la administración más eficiente de la frontera, el
fortalecimiento de la competitividad regional, las condiciones que
enfrentan las comunidades mexicanas en ese país y los esfuerzos
conjuntos contra el crimen organizado transnacional, precisó en un
comunicado Los Pinos.
Además, ambos líderes dialogarán sobre temas globales y regionales de interés común, añadió la información oficial.
La reunión con el congresista John Boehner “se inserta en el diálogo
intenso, respetuoso e institucional que el Gobierno de México mantiene
con el Congreso estadounidense, así como con los líderes de las dos
principales fuerzas políticas que lo integran”.
Según la Presidencia, en el Congreso de Estados Unidos existe “un
respaldo bipartidista al presidente Calderón y a las acciones contra la
delincuencia organizada transnacional, lo que se ha traducido en la
asignación de recursos, sin precedente, para la cooperación bilateral”.
Para Los Pinos, Obama “ha mostrado interés en ampliar las áreas de
convergencia con México”, y como ejemplo citó que Calderón fue el primer
mandatario con quien se reunió Obama antes de asumir la Presidencia en
2009.
Además, la Presidencia destacó la “empatía” entre ambos presidentes lo
que permite vislumbrar “un periodo de diálogo y entendimiento”.
Calderón, anotó Los Pinos, “ha expresado que mientras más seguro esté México, más seguro estará nuestro vecino del norte”.
Por ello, Calderón reitera la necesidad de la corresponsabilidad en
temas de seguridad, combate al crimen organizado y tráfico de armas”.
Para México se requieren acciones conjuntas para combatir el tráfico de
armas, dinero y precursores químicos; de la misma forma, son esenciales
las acciones para reducir la demanda de narcóticos y desarticular las
redes financieras de las organizaciones criminales.
Incluso, “México ha enfatizado invariablemente la importancia de la
contribución de los trabajadores inmigrantes al bienestar económico de Estados Unidos
y la necesidad de mejorar el clima político en el tema, particularmente
para evitar abusos y violaciones a los derechos humanos de los
mexicanos”.
