Santa Fe, Argentina.- Dos hombres y una mujer embarazada entraron a robar a un club deportivo de la ciudad. Los primeros pudieron escapar con el botín sin problemas, pero la mujer quedó atrapada en la reja de una ventana.
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“No quiero perder a mi bebé”, gritaba desesperada la mujer ladrona, cuando se dio cuenta que un guardia del recinto se acercaba a ella.
El guardia se dio cuenta rápidamente que no podía liberarla, así que pidió ayuda de la ambulancia, policías y bomberos.
El rescate no fue rápido ni sencillo. Mientras cortaban los barrotes de la reja, la mujer seguía pidiendo auxilio por su bebé.
“Ya se fueron”, comentó refiriéndose a sus cómplices que la dejaron atrás.
Y tenía razón. Cuando los uniformados ingresaron al recinto, los otros dos delincuentes no estaban en el lugar. Además de dejar a su compañera atrapada, los hombres se llevaron dos netbooks y otros artículos tecnológicos.
La mujer fue trasladada a un recinto de salud. Allí constataron que el bebé no había sufrido ningún daño. La fiscal a cargo ordenó que la ladrona debía seguir internada, pero con custodia policial.
“Nos robaron dos computadoras de la secretaría. El scanner que estaba al lado y todo el equipamiento como mouse y teclados. También dos netbooks que estaban en un armario”, explicó la directora del club deportivo.