?Moscú.- El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, pidió hoy a la Policía y a las fuerzas de seguridad del país actuar con dureza contra los xenófobos y los instigadores de choques y disturbios étnicos.
“Hay que poner fin sin vacilaciones a cualquier intento de desatar el odio étnico y provocar disturbios”, dijo el jefe del Kremlin en una reunión del Consejo de Estado, órgano consultivo que reúne a miembros del Gobierno, jefes regionales y otras altas autoridades rusas.
Medvédev insistió en que hay que actuar “con dureza, sin miramientos”, porque “los delincuentes no tienen nacionalidad” .
“Hay que aislarlos y castigarlos, sin entrar en detalles de orden etnográfico o sociológico, sin diferenciar entre más próximos y ajenos, como ha ocurrido alguna vez en nuestra historia” , enfatizó.
El presidente ruso modificó la agenda del día del Consejo de Estado, que inicialmente tenía previsto abordar problemas relativos al apoyo a la familia, la maternidad y la infancia, y dedicó la reunión, trasmitida en directo por el canal de noticias Vesti-24, a la lucha contra la xenofobia.
“Para Rusia, los conflictos étnicos, dondequiera que tengan lugar, son mortalmente peligrosos” , dijo Medvédev, quien admitió que en muchas regiones del país “las relaciones étnicas son tensas” .
Recalcó que sin resolver el asunto de la coexistencia pacífica entre las diferentes etnias del país “no es posible la conservación ni el desarrollo del Estado” .
“Rusia tiene una experiencia que consiste en que, a diferencia de otros países, los pueblos de nuestro país conservaron su lengua, su religión y alcanzaron la unidad política” , dijo Medvédev, quien subrayó que este estado no se consigue de una vez y para siempre y citó como ejemplo la desintegración de la Unión Soviética.
Advirtió a los funcionarios públicos de todos los niveles de que se abstengan de tomar partido en favor de uno u otro bando en los conflictos étnicos.
“Todos los funcionarios del Estado, ocupen el cargo que ocupen y trabajen en la región que trabajen, deben actuar en interés de todo el pueblo, y no en favor de determinados grupos” , añadió.
A principios de diciembre, el asesinato de un aficionado al fútbol ruso por un caucasiano desató movilizaciones nacionalistas en Moscú que desembocaron en violentos choques contra la policía y ataques contra personas de apariencia no eslava.