Vaticano.- El mayordomo del Papa Benedicto XVI se declaró
el martes inocente de los cargos de robar su correspondencia privada,
pero reconoció que se siente culpable de traicionar la confianza del
Pontífice, a quien dijo querer como a un padre.
Paolo Gabriele subió al estrado de una corte en el Vaticano para
defenderse de un cargo de robo agravado. Los fiscales dicen que Gabriele
hurtó misivas y documentos papales en los que se hacía referencia a
luchas de poder y a presuntos actos de corrupción en la Santa Sede.
El acusado entregó presuntamente los documentos a un periodista, lo que
derivó en uno de los peores escándalos durante el pontificado de
Benedicto XVI.
En otros testimonios presentados el martes, el secretario privado del
Papa, monseñor Georg Ganswein, declaró que comenzó a sospechar de
Gabriele tras percatarse de que tres documentos incluidos en el libro
del periodista sólo pudieron haber salido de la oficina que compartía
con el mayordomo.
CHG