Roma. Poco antes de su fallecimiento, el papa Francisco destinó una donación personal de 200 mil euros a favor de personas privadas de libertad, informó el obispo Benoni Ambarus, encargado de la pastoral carcelaria en Roma.
Según recordó, el recurso fue asignado a una fábrica de pasta ubicada en el centro penitenciario juvenil de Casal del Marmo. La donación fue solicitada con el objetivo de ayudar a saldar una hipoteca pendiente que limita el crecimiento del proyecto.
“Le dije que tenemos una hipoteca cuantiosa para esta fábrica de pasta y que si conseguíamos cubrirla bajaríamos los precios de la pasta, venderíamos más y podríamos contratar más chicos”.
Te puede interesar leer: Más de 20 mil fieles visitan la Basílica de San Pedro en el primer día para despedir al Papa Francisco
El obispo recordó su última visita carcelaria, realizada apenas cuatro días antes de su muerte, durante el Jueves Santo en la prisión de Regina Coeli.
Durante sus más de 12 años como líder de la Iglesia católica, el papa Francisco visitó múltiples centros penitenciarios y promovió una visión pastoral centrada en la dignidad humana, incluso en contextos de reclusión.
En diciembre pasado, inauguró el Año Santo en la cárcel de Rebibbia, al abrir allí una de las Puertas Santas del Jubileo, reafirmando simbólicamente su cercanía con este sector marginado de la sociedad.
