Rusia. En días pasados autoridades rusas clausuraron una fábrica de refrescos que reproducía de manera irregular la famosa bebida de Coca Cola, en escala industrial.
Según se informó, las autoridades localizaron en el lugar tres líneas automatizadas, botellas de refrescos, botes de concentrado, etiquetas, tapas y equipos de impresión de logotipos.
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En la lugar había además 22 inmigrantes que fabricaban productos falsificados a escala industrial, “agregaron químicos al agua, luego carbonataron la mezcla y la vertieron en recipientes de plástico”, explicó la policía.
Medios locales confirmaron que los inmigrantes involucrados en el incidente fueron multados con cinco mil rublos, es decir 885.91 pesos mexicanos, además de que fueron expulsados del país.
Los refrescos apócrifos eran repartidos para su venta en varios lugares en Moscú, además se dio a conocer que en la ciudad de Mytishchi, también se encontró un almacén con bebidas similares y se incautaron en total 33 mil botellas falsificadas.
Según se informó, el propietario del establecimiento confesó que había comprado la mercancía en el mercado y había acordado con el vendedor entregas periódicas para evitar levantar sospechas a las autoridades.
