Ammán.- El Gobierno jordano condenó hoy la entrada de supuestos extremistas judíos y rabinos a la mezquita
de Al Aqsa de Jerusalén Este para realizar ritos propios en este lugar,
el tercero más sagrado del islám tras La Meca y Medina.
El viceprimer ministro y ministro de Asuntos Islámicos de Jordania,
Abdul Salam Abadi, criticó en un comunicado que en los últimos días este
tipo de personas ha entrado en la mezquita “bajo protección de la
policía israelí”.
El ministro consideró que este tipo de prácticas -que suelen estar
acompañadas de rituales judíos en el lugar sagrado- ha aumentado
últimamente durante las festividades judías y es “contrario al derecho
internacional”, por lo que pidió que las autoridades israelíes prohíban
la entrada de estos grupos.
Además de la entrada de extremistas, Jordania denunció las excavaciones
israelíes en los alrededores de Al Aqsa, la demolición de casas en
Jerusalén Este y los “intentos de destruir la cultura árabe e islámica”
en esa zona.
Jordania firmó un tratado de paz con Israel en 1994 en virtud del cual
el Estado judío reconoció el derecho de Ammán a cuidar los santuarios
islámicos y cristianos en la ciudad santa.IN