Estados Unidos. El Departamento de Correccionales en Minnesota informó que más de 100 presos de la cárcel de Stillwater se negaban a entrar a sus celdas tras las altas temperaturas registradas en el estado.
Varios reclusos calificaron la negativa como un acto de “auto-preservación” en medio de temperaturas peligrosamente altas en la región.
Pese a las inconformidades de los reclusos, las autoridades lograron un diálogo sin ningún tipo de agresión donde finalmente los hombres regresaron a sus celdas.
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“La situación fue tranquila, pacífica y estable durante todo el día”, dijo un portavoz del Departamento de Correccionales, quien añadió que las personas encarceladas en la unidad manifestaron su descontento porque el centro penitenciario, con escasez de personal, tuvo que limitar el tiempo que los reclusos pasaban fuera de sus celdas.
Familiares de los presos señalaron que ellos ya están hartos de las fuertes temperaturas y del acceso limitado a duchas y hielo durante los cierres de emergencia intermitentes que han vivido en los últimos dos meses.
La prisión se encuentra en Bayport, a unos 40 kilómetros al este de la ciudad de Minneapolis, la cual fue objeto de una alerta de calor por la tarde por temperaturas cercanas a los 37.7 grados Celsius.
