Sídney.- Los Juegos Olímpicos de París 2024 se realizarán en los próximos meses, por lo que desde ahora los fanáticos del deporte se preparan para disfrutar de sus disciplinas favoritas y también recuerdan las anécdotas más destacadas de versiones anteriores, como lo es el polémico caso de la atleta Marion Jones.
La velocista estadounidense se convirtió en un ícono mundial gracias a su participación en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000, donde logró llevarse un total de cinco medallas: tres de ellas de oro en los 100 metros, 200 metros y 4×400 metros, mientras que en los 4×100 metros y el salto de longitud logró hacerse a las medallas de bronce.
Te puede interesar: Militares de varios países vigilarán los Juegos Olímpicos de París
Encuentra el video DANDO CLIC AQUÍ.
Pero la cerrera exitosa de Marion Jones estaría por derrumbarse, ya que en 2003 una fuente anónima advirtió a la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA) que numerosos deportistas estadounidenses estaban utilizando un novedoso método de doping. Este se trataba del llamado THG, una mezcla de cinco sustancias que combinadas y suministradas de cierta forma resultaban indetectables en los test antidopaje de la época.
La investigación dejó al descubierto el caso de varios deportistas que llegaron a la cima mediante engaños, pero el mayor peso recayó sobre la medallista olímpica Marion Jones, quien fue descalificada para Atenas 2004 y vio empañada su carrera totalmente.
Y es que algunos años después, en 2007, Marion Jones admitió mediante una carta enviada a familiares y amigos que utilizó esteroides como parte de la preparación para los Juegos Olímpicos de Sídney.
En ese entonces la atleta explicó que desde 1999 y por dos años tomó el esteroide conocido como ‘The clear‘, el cual le fue proporcionado su ex entrenador, Trevor Graham, asegurando que se trataba de un suplemento nutricional y debía tomarlo colocándose dos píldoras debajo de la lengua.
Sigue más noticias como esta en nuestra sección de Deportes
Luego de admitir haber utilizado sustancias dopantes, Marion Jones tuvo que entregar sus cinco medallas al Comité Olímpico Internacional (COI), también fue condenada a seis meses de prisión por haber mentido durante una inspección federal, así como por perjurio en un caso criminal por fraude y lavado de dinero.
Además, la entonces International Amateur Athletic Federation (IAAF) anuló todos sus resultados y marcas conseguidas a partir del año 2000, lo que borró su legado de las pistas y opacó su carrera para siempre.