Argentina.- Las situaciones de abandono familiar son bastante comunes, pero hay un caso en Argentina que está atrayendo especial atención, pues un hombre identificado como Adolfo Enrique Sandoval fue localizado 30 años después de haber salido de su casa para “comprar cigarrillos”, por lo que las autoridades locales investigan su misteriosa “desaparición”.
El caso comenzó en febrero de 1993, cuando el hombre de origen chileno salió de su hogar en Comodoro Rivadavia, Chubut, asegurando a su esposa que no tardaría más de unos minutos, ya que en su momento le dijo: “Voy hasta el kiosco (la tiendita) de la esquina a comprar cigarrillos y regreso”. Sin embargo, Adolfo Enrique, quien para ese entonces tenía 32 años, nunca más volvió a su casa.
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A pesar de interponer una denuncia por su desaparición, ni la esposa ni la familia chilena del hombre obtuvieron pistas sobre su paradero en los últimos 30 años. No obstante, la oficial Daniela Millatruz, jefa de la División de Búsqueda de Personas, realizó algunas investigaciones que la llevaron a una dirección en la pequeña localidad de General Conesa, en la provincia de Río Negro, donde residía una persona con el mismo nombre que el desaparecido:
Solamente teníamos el nombre que era lo que coincidía, pero nada más. Fuimos de comisión y a los fines de entrevistarnos personalmente con él y ver si realmente era la persona buscada de 1995 acá en Comodoro. Cuando llegamos nos presentamos y hablando con él, comentándole una nota de los medios, refiere que sí, que era él la persona buscada.
Adolfo Enrique Sandoval Farías confesó ser la persona que habían estado buscando, a pesar de que ahora tiene 60 años. Con total tranquilidad, aseguró que había decidido alejarse debido a diferencias con su esposa, Nelci Isabel, pues “estaba cansado” y simplemente decidió cortar cualquier comunicación con sus familiares.
El sujeto explicó que en aquel momento simplemente le dijo a su esposa que se iba y, sin mirar atrás, se puso su campera, agarró sus documentos y se marchó. Durante todos estos años, no intentó comunicarse “ni brindar información de que estaba bien”. Además, dejó en claro que “no era su intención” retomar el contacto con sus seres queridos.
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La oficial Millatruz señaló que la esposa que realizó la denuncia en ese momento falleció hace algunos años, por lo que ahora las autoridades están trabajando para localizar a los hijos de la mujer y poner fin a esta historia que ha mantenido en vilo a la familia durante tres décadas.
