México. En la era digital, los teléfonos celulares se han convertido en una extensión de nuestras manos, y México no es la excepción. Los datos más recientes de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) del Inegi muestran una realidad que podría sorprendernos: los mexicanos están pasando cada vez más tiempo frente a las pantallas de sus dispositivos móviles.
De acuerdo con los resultados de la encuesta publicada en junio de 2024, más de 97 millones de mexicanos, lo que equivale al 81.4 por ciento de la población de seis años o más, tienen acceso a teléfonos celulares con conexión a internet. Esto refleja una tendencia de conectividad generalizada en el país, que va de la mano con el aumento en las horas de uso diario.
Entre los usuarios más activos se encuentran los jóvenes adultos. Los mexicanos de 18 a 24 años lideran el uso de internet, con un promedio de 5.9 horas al día frente a sus pantallas. Esto significa que, anualmente, estos jóvenes pasan más de dos mil 100 horas conectados. En el segundo puesto se encuentran las personas de 25 a 34 años, con 5.6 horas, seguidos por los adolescentes de 12 a 17 años, quienes dedican 4.7 horas diarias a navegar en la web.
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A pesar de la popularidad de los smartphones, los hogares mexicanos también siguen utilizando otros dispositivos. Un 43 por ciento de las familias en el país disponen de una computadora, ya sea de escritorio, laptop o tablet, lo que representa más de 16 millones de hogares. Sin embargo, el celular sigue siendo el aparato predilecto para actividades diarias.
¿En qué pasan el tiempo los mexicanos en internet? La mayoría utiliza sus teléfonos para comunicarse, disfrutar de entretenimiento y acceder a redes sociales como Facebook, Instagram y TikTok. Por otro lado, actividades como las compras en línea, el uso de servicios en la nube y las operaciones bancarias virtuales siguen siendo menos frecuentes.
El uso intensivo de tecnología está marcando una nueva era en las costumbres sociales y laborales de los mexicanos. Aunque la conectividad trae innumerables beneficios, también plantea retos relacionados con la dependencia y el impacto en las relaciones personales. Sin duda, las horas que pasamos frente a la pantalla siguen en aumento, y es un fenómeno que podría seguir evolucionando en los próximos años.
