Los Mochis, Sin.- Con bastante afluencia de pacientes funciona el Módulo de Atención Respiratoria del Seguro Social -MARSS- de la Unidad de Medicina Familiar número 37.
Los enfermos con síntomas de gripa, tos, fiebre, dolor muscular, de garganta, de cabeza, de ojos y/o escurrimiento nasal, llegan a solicitar consulta médica ante la sospechosa posibilidad de que se trate de COVID-19.
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Los pacientes reciben un formato para que anoten los síntomas respiratorios que presentan, así como un número de turno de atención, y luego esperan ser consultados para obtener la constancia de incapacidad que necesitan para presentarla en su centro de trabajo.
Sin embargo, algunos trabajadores enfermos de infecciones respiratorias desconocen este procedimiento y se van directo a Urgencias o a su consultorio familiar, desde donde son enviados al MARSS, como le sucedió a Olga, una de las pacientes entrevistada por Línea Directa mientras esperaba ser atendida para obtener su incapacidad laboral.
“Estamos desde cuándo, desde las 10 y media ando aquí yo porque me cargaron en vueltas a mí, que allá y que acá y ahora aquí”.
¿De urgencias la mandaron para acá?
“Sí, y después al consultorio familiar y del consultorio para acá por la incapacidad, porque la doctora familiar no me podía dar incapacidad”.
Y a pesar de que en el MARSS hay dos turnos de consulta, es decir, en la mañana a partir de las 8:00 horas, y en la tarde desde las 13:00 horas, a veces se agotan los turnos disponibles, por lo que en el turno matutino algunas personas siguen esperando recibir atención en el turno vespertino, y en ocasiones por la tarde también se terminan los turnos, como sucedió este jueves que a las 16:30 horas entregaron los últimos turnos, por lo que algunos trabajadores tienen que regresar al día siguiente.
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