Ciudad del Vaticano, Roma. – El humo blanco se ha elevado y el mundo católico ya tiene nuevo papa. La elección, que se concretó tras varias votaciones, fue resultado de un proceso marcado por la reflexión profunda, la oración y el discernimiento colectivo de los cardenales para elegir a un papa acorde a los retos de la Iglesia, así lo explicaba minutos antes de conocer la decisión el sacerdote sinaloense Alfredo Portillo, testigo de este momento histórico desde el Vaticano.
Sigue la información del norte de Sinaloa en la sección especial de Línea Directa
Alfredo Portillo, originario de Guasave, Sinaloa, y estudiante de Filosofía en Roma, compartió en entrevista para la primera emisión de Línea Directa que la aparente demora no era un indicio de división o incertidumbre, sino todo lo contrario: un testimonio de la madurez espiritual con la que se ha asumido la misión de elegir al nuevo sucesor de Pedro.
“Esto no es una señal preocupante. Al contrario, nos habla de una Iglesia que está discerniendo con mayor conciencia las implicaciones del papado en estos tiempos tan complejos que vive el mundo”, expresó.
Debes leer: ¡Ya hay Papa! ¿Qué sigue después de la fumata blanca en El Vaticano?
El proceso, que requirió más de una jornada de votaciones, refleja que hubo varios candidatos con carisma, prudencia y claridad para afrontar los grandes retos contemporáneos de la Iglesia católica y así lo mencionó el presbítero. Que este contexto no debió verse como una dilación, sino como una búsqueda seria, responsable y guiada por el Espíritu Santo.
“El mundo hoy exige mucho más del sucesor de Pedro. Hay una conciencia creciente entre los cardenales sobre la necesidad de un liderazgo espiritual firme, sabio y profundamente conectado con la realidad social, cultural y política que vivimos”, comentó.
Durante las deliberaciones hubo momentos de silencio y oración, e incluso estaba previsto un descanso espiritual para el sábado en caso de no alcanzarse la mayoría calificada antes del viernes. Sin embargo, la elección se dio de manera oportuna, siguiendo los tiempos ordinarios previstos por el protocolo eclesiástico.
Sugerida: ¡Habemus Papam! La ‘Fumata Blanca’ sorprende al mundo y el cónclave eligió Papa
Aunque no se conocían de señales anticipadas que indicaran la elección, el sacerdote en Roma mantenía la esperanza de que el resultado se diera de un momento a otro.
“Ojalá todos pudiéramos tener la facultad de saber en qué momento exacto sucederá, pero no es así. Es un proceso espiritual”, comentó entonces.
El sacerdote guasavense destacó que esta era una muestra clara de que la Iglesia está más consciente que nunca de su responsabilidad en estos tiempos inciertos.
Te puede interesar: El costo millonario del cónclave tras la muerte del papa Francisco
“Este no es un pontificado cualquiera. Este es un llamado profundo, un mandato que surge de la oración y la escucha de Dios. Y eso, lejos de preocuparnos, debe llenarnos de esperanza”.
Desde Roma la emoción es contenida, pero solemne. La Iglesia tiene nuevo papa y con él una renovada esperanza para millones de fieles en el mundo que esperan guía, paz y fortaleza espiritual para los tiempos venideros.